Las otras víctimas (in)visibles del terrorismo
El 11 de marzo se conmemora el Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo. La elección de esta fecha fue consecuencia directa del brutal atentado que azotó a Madrid en 2004, en el que murieron 192 personas, y que fue perpetrado por una célula terrorista de Al-Qaeda. Era el mayor atentado yihadista en el viejo continente hasta ese momento, pero no sería el último.
Pakistán, 16 de febrero: 88 muertos (al menos, 20 eran mujeres y 9, niños). Irak, 19 de febrero: 5 muertos. Pakistán, 21 de febrero: 7 muertos. Egipto, 22 de febrero: 2 muertos. Afganistán, 28 de febrero: 12 muertos (todos policías). Afganistán, 8 de marzo: más de 30 muertos.
Son solo algunos de los últimos atentados yihadistas de este 2017 cometidos en países de mayoría musulmana. Más del 90% de las personas que viven en Irak, Afganistán o Pakistán profesan esta religión, según publica Pew Research Center, y son también los que más sufren la violencia de los grupos terroristas islamistas.
En el mundo hay 1.600 millones de musulmanes, es decir, alrededor de un 23% de la población mundial. Se estima que alrededor de 100.000 militan en grupos terroristas, lo que supone el 0,006%, sin embargo, en numerosas ocasiones los musulmanes son colocados en la posición de verdugos, olvidando que ocupan el primer lugar en la categoría de víctimas.
Día para recordar
Este 11 de marzo se conmemora el Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo. La elección de esta fecha fue consecuencia directa del brutal atentado que azotó Madrid en 2004, que fue perpetrado por una célula terrorista de Al-Qaeda y en el que murieron 192 personas. Fue el mayor atentado yihadista en el viejo continente hasta ese momento, pero no sería el último.
Entre 2000 y 2015, alrededor de 430 personas han perdido la vida en Europa Occidental por un ataque terrorista islamista. Las bombas en Atocha, el atentado en el metro de Londres o las explosiones en la sala Bataclán, en Francia, han sido algunos de los actos que han conseguido sembrar el terror en Europa. Mientras tanto, Oriente también se desangraba. Cada víctima cuenta, cada víctima duele, cada víctima se llora, en todas partes del mundo.
«Menos del 3% de las muertes por terrorismo suceden en Occidente»
Las cifras de muertos en países como Irak, Pakistán o Afganistán se cuentan por miles. En un solo año, en 2014, hubo 32.658 víctimas, lo que supuso un incremento del 80% con respecto al año anterior. Los más afectados fueron los propios países musulmanes, mientras que las muertes por terrorismo ocurridas en Occidente no superaron el 3%.
Si nos centramos, por ejemplo, solamente en Irak, la ONU alerta de que en un año se produjeron 8.493 asesinatos de civiles y más de 10.000 fueron sometidos a vejaciones de todo tipo; hombres, mujeres y niños que sufrieron violencia sexual o fueron reclutados en los propios grupos terroristas. En este país de mayoría musulmana la guerra entre las Fuerzas de Seguridad Iraquí y el autoproclamado Estado Islámico está acabando con su propia gente.
En numerosas ocasiones, este colectivo se ha levantado en contra de los grupos islamistas que siembran el terror alrededor del mundo. En Reino Unido, jóvenes musulmanes británicos declararon su propia ‘yihad’ contra el Estado Islámico y contra todos los demás grupos terroristas. La Liga Juvenil Musulmana en el país anunció su lucha contra el EI diciendo que los militantes no tenían “ningún vínculo con el Islam o con la comunidad musulmana”.
Veto de Donald Trump
A pesar de que el número de muertos afecta en primer lugar a los musulmanes, la adopción de políticas como las llevadas a cabo por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, criminalizan de manera general a este colectivo. El primer veto migratorio de Trump fue paralizado por la justicia, sin embargo, el presidente estadounidense ha firmado uno nuevo con el que pretende prohibir la entrada de refugiados al país y detener la emisión de visados a los ciudadanos de Irán, Somalia, Yemen, Libia, Siria y Sudán. Trump juega con el argumento de la seguridad nacional.
Sin embargo, si recordamos la tragedia del 11 de septiembre de 2001 contra las Torres Gemelas en Nueva York, los terroristas procedían de Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y Egipto, pero Trump no ha incluido a ninguno de estos países en su lista negra. Un reportaje del Washington Post vincula esta decisión a que la organización comercial del presidente estadounidense tiene intereses comerciales en algunos de los países a los que no se les ha impuesto veto migratorio.
Sea como fuere, este tipo de políticas difuminan la realidad de unas víctimas que parece que duelen menos.