El día más importante para una mujer – también para algunos hombres – es el de su boda. Todo detalle cuenta: el vestido, el maquillaje, los zapatos, el banquete, las flores… y como no, el reportaje fotográfico. Además de nuestros recuerdos, las fotografías inmortalizarán para siempre todos esos detalles de uno de los días más especiales de nuestras vidas. En España tenemos la suerte de contar con el mejor fotógrafo de bodas del mundo, Víctor Lax, un aragonés afincado en Zaragoza que acaba de recibir el ‘Premio Fearless al Mejor Fotógrafo del Año 2016′, otorgado por la prestigiosa web Fearless Photographer. «Casi no me lo creo. Llevo muchos años persiguiendo este premio», cuenta a The Objective Lax, quien asegura que a pesar de haber recibido este reconocido galardón tiene los pies muy en el suelo porque «no se vive de los premios, se vive de las parejas».
Fearless Photographer, creada en Estados Unidos, reúne a más de 4.000 profesionales especializados en la fotografía de boda en el mundo, y al año otorga seis veces el ‘Premio Fearless al Mejor Fotógrafo del Año’, con el cual se pretende dar un mayor reconocimiento a la creatividad, la novedad y la frescura de un trabajo que en los últimos años ha vivido una profunda renovación, convirtiéndose en una de las disciplinas más exigentes en nuestro días.
En esta sexta edición del concurso se presentaron más de 15.000 imágenes de todo el mundo. Lax, que ha ganado 23 premios en los últimos tres años, diez de ellos en el 2016, se presentó con 15 fotos que han situado a España en lo más alto en el mapa de la fotografía de bodas a nivel mundial. «Detrás de cada premio hay un enorme trabajo y existen multitud de imágenes hasta poder conseguir algo importante, ahí reside la calidad real de cada fotógrafo», nos cuenta el joven fotógrafo de 37 años, quien debido a la crisis y después de muchos años en prensa escrita, lleva ocho trabajando en nupcias.
Entre una de sus fotografías más ‘raras’ o curiosas, la de una pareja de novios rodeados de buitres. «Se trataba de un matrimonio amante de la montaña, así que nos fuimos a un paisaje rocoso y cuando menos esperábamos nos encontramos con decenas de estos animales», nos cuenta risueño. «La imagen es toda una alegoría de la felicidad, a veces es tan difícil separar lo bueno de lo malo».
En la actualidad, Lax trabaja en cualquier parte de España y del mundo. Sin ir más lejos, tras recorrer Noruega, los Alpes, Francia, Turquía y Estados Unidos con sus trabajos del pasado año, en 2017 viajará a Italia, Londres, Cantabria, Marbella y las Islas Baleares. Sus reportajes rondan los 3.000 euros por servicio completo y parte de su trabajo puede verse en su web oficial, victorlax.net, o en su cuenta de Instagram (@victorlax).