THE OBJECTIVE
Lifestyle

Los 13 orgasmos que toda mujer debe tener al menos una vez

Ampliar el espectro y las opciones puede permitir una vida sexual mucho más amplia y, por qué no, placentera

Los 13 orgasmos que toda mujer debe tener al menos una vez

Mucho se ha hablado sobre el orgasmo femenino, pero aunque se conoce con más frecuencia el que se alcanza mediante la estimulación del clítoris, hay muchas otras vías de llegar a ese máximo de placer sexual. Las mujeres alcanzan más fácilmente el orgasmo cuando reciben múltiples estimulaciones, según un estudio de The Journal of Sex Research, por esta razón, ampliar el espectro y las opciones puede permitir una vida sexual mucho más amplia y, por qué no, placentera.

Clitoridiano

Comenzamos por el primero y más conocido. Es el centro del placer sexual femenino: el orgasmo del clítoris. El clítoris es una estructura pequeña, densa de los nervios, asentada en la parte superior de la abertura vaginal. «Si nunca has tenido un orgasmo antes, debes comenzar con el clítoris», ha dicho para Women’s Health Vanessa Marin, una terapeuta sexual y creadora de Finishing School, un curso online para orgasmos femeninos.

Para tener un orgasmo de clítoris lo primero es averiguar es si se prefiere la estimulación directa o indirecta, es decir, tocar el clítoris en sí, o a través de los labios y zonas que rodean el clítoris. Marin sugiere frotarlo con los dedos (en lugar de un juguete sexual) al principio, «yendo en forma de espiral alrededor de su clítoris».

Del punto G

La pregunta más repetida en Google sobre sexo entre adultos de 18 a 65 años, según un estudio de Durex de 2017, es ¿dónde está el punto G? No hay consenso a la hora de situar la zona exacta en el que se encuentra el «punto Gräfenberg» o punto G, nombre que toma del ginecólogo alemán que empezó a investigar al respecto en los años 50.

Se repite a menudo que las mujeres tienden a sentir más placer en la pared vaginal frontal y que el punto G está, supuestamente, entre 5 y 8 centímetros en el interior de la vagina en la parte frontal de la pared que está tocando con el ombligo. El punto G es descrito como ovalado y del tamaño de una alubia. Además, es una zona altamente erógena y, para los expertos, el equivalente femenino a la próstata. Para lograr un orgasmo en el punto G lo primero es encontrarlo y estimular la zona.

Mixto o múltiple

Los orgasmos combinados se dan cuando se mezclan la estimulación del clítoris con algún otro tipo de estimulación. Entonces, teóricamente, se podría lograr un orgasmo combinado al estimular los pezones y el punto G simultáneamente, aunque la combinación más común es la del clítoris y del punto G.

Anal

Hay nervios compartidos entre la pared anterior del ano a la vagina, por ello hay mujeres que pueden sentir excitación sexual mediante la estimulación rectal. La estimulación del nervio pélvico a través del recto también puede conducir al placer. Algunas mujeres disfrutan más del sexo anal que del vaginal cuando lo dominan.

Del punto A

Ubicado hacia el final del canal vaginal, el punto A se encuentra cerca de la entrada al útero. Es decir, en la pared vaginal frontal hacia el área del ombligo. También es conocida como el fondo de saco anterior. La presión adecuada sobre la zona es similar a la estimulación indirecta del punto G.

Aunque algunos expertos se muestran escépticos en cuanto al potencial erógeno supuesto del punto A, los creyentes dicen que si se inserta un dedo hasta el punto G, y luego continúa más profundo, hacia el cuello uterino, puede alcanzar un clímax poderoso al estimular el área como lo haría con su punto G.

Del punto C

El punto C está en el cuello uterino e involucra terminaciones nerviosas ubicadas allí y alrededor del útero. Las diferencias anatómicas y el historial quirúrgico, es decir, una histerectomía que involucra la extracción del cuello uterino, pueden afectar la capacidad de una persona para alcanzar el orgasmo cervical. Hay mujeres heterosexuales a las que les duele la penetración cuando toca esta zona, pero cuando no es así, puede ser uno de los mejores orgasmos a tener.

Del punto U

La uretra –sí, el orificio de orinar– puede ser una zona propicia al orgasmo femenino. Esa área está rodeada por el clítoris hasta por tres zonas ya que éste es en realidad mucho más grande de lo que se piensa.

Cuando se estimula la uretra, el tejido eréctil que rodea la abertura se llena de sangre, lo que desencadena que las glándulas de Skene produzcan líquido prostático (el protagonista de la eyaculación femenina) y la mujer se excite hasta alcanzar el clímax. Para encontrarlo, encuentre su uretra (justo debajo del clítoris) y toque la superficie inmediatamente superior a esta.

De los pezones

Probablemente ya sepa dónde y qué son los pezones, pero lo que quizás no sepa es que algunas personas pueden llegar al orgasmo únicamente por su estimulación. Cuando se estimulan los pezones, se libera oxitocina, la hormona que causa las mismas contracciones uterinas y vaginales asociadas con el orgasmo.

Coregasmo

Un coregasmo es cuando haces ejercicio y tienes orgasmos por la actividad física. No es algo para lo que se pueda entrenar el cuerpo. ¿Por qué suceden? Pueden ocurrir de correr, debido a que los muslos al frotarse entre sí pueden estar generando estimulación indirecta del clítoris.

Pero el más común es el de los entrenamientos centrales. Algunas mujeres los tendrán simplemente haciendo abdominales, otras mujeres debido a algunas posturas o movimiento de yoga o al estar en una posición de puente.

De la piel

Suena extraño pero es tan literal como llegar a un orgasmo simplemente por estimulación de la piel. Es impredecible que suceda, pero suele estar acompañado de otro tipo de motivaciones como palabras al oído o incluso música.
Orgasmo al dormir

El cerebro puede llegar a producir un orgasmo al dormir debido a la relajación. Los pensamiento suelen ser los principales enemigos del orgasmo. Por esta razón, en el sueño, la mente puede explorar libremente de las fantasías sexuales sin sentirse juzgada y llevar a tal excitación que lleve al clímax (y, quizá, a despertarte).

Respuesta sexual expandida

La respuesta sexual Expandida (RSE) es un fenómeno definido recientemente, explica la Escuela Latinoamericana de Medicina Sexual. Se conoce como la capacidad de alcanzar orgasmos de larga duración, prolongados, múltiples o sostenidos o el estatus orgasmus que dura más tiempo y es más intenso que los patrones de orgasmos clásicos que se definen en la literatura. Durante la detallada encuesta preliminar para investigar el supuesto fenómeno RSE en algunas mujeres, también se estudiaron los sentimientos subjetivos y estados alterados de conciencia (EAC) durante orgasmos muy intensos y prolongados en mujeres con RSE. Durante la encuesta preliminar 72 tipos de sentimientos subjetivos diferentes y patrones de EAC se describieron en 47 mujeres con RSE. Entre estos se encuentran: despersonalización, experiencia fuera del cuerpo, volar, sentimiento de morir (petit morte), éxtasis, rapto, sensación de explosión, temblor, sensación de terremoto. Se concluyó que en algunas mujeres con RSE, algunos orgasmos muy intensos y prolongados inducen una forma de EAC cuyo mecanismo aún no se explica.

Orgasmos cerebrales

Conocidos como ASMR, en español Respuesta Sensorial Meridiana Autónoma, producen una intensa sensación de relajación que puede estar acompañada por un hormigueo que va desde la cabeza hasta el final de la espina dorsal. No es un orgasmo como los anteriores, sino que se produce por escuchar sonidos particulares o ver cosas que producen relajación. Los vídeos de personas susurrando, pasando una pluma por un micrófono, haciendo ruidos con una pequeña caja o chasqueando los dedos están de moda en YouTube y producen un “masaje cerebral” que conlleva a estos orgasmos cerebrales.

MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D