Ecodicta, un ‘armario compartido’ para estrenar ropa todos los meses

Este servicio de alquiler de ropa ofrece a sus clientas la posibilidad de compartir armario, disfrutando de nuevas prendas todos los meses sin necesidad de adquirirlas o acumularlas, al tiempo que visten de manera más sostenible.

 

Imagina un servicio de alquiler de ropa, de suscripción mensual y sin compromiso. Al estilo de Netflix, y eligiendo uno de sus tres planes de 30 a 50 euros, cada mes recibes entre dos y cuatro prendas, accesorios incluidos, que puedes utilizar cuanto quieras. Al terminar este periodo puedes devolver la ropa y disfrutar de otras prendas o comprar aquellas que te hayan enamorado. Así funciona Ecodicta, un proyecto que pretende luchar contra el contaminante modelo de la ropa de usar y tirar ofreciendo a sus clientas un armario compartido que pueden renovar cada 30 días.

“Por trabajo mi esposa Mercedes y yo teníamos que estar yendo a eventos y conferencias continuamente”, cuenta Rául González, CEO de Ecodicta y cofundador del proyecto junto a Mercedes García, Mario Carreras y José Manuel Fuertes. “Te hacían una foto y la siguiente semana no podías repetir el modelo. Teníamos la necesidad constante de comprar ropa que veíamos cómo crecía en el cuarto, pero que no nos podíamos volver a poner. Pensamos que una respuesta sería alquilar puntualmente cosas que complementen el armario sin necesidad de acumular”, y así fueron pergeñando Ecodicta, que permite vestir de manera más sostenible sin renunciar a las novedades.

En septiembre de 2018 empezaron a trabajar en la web y comprar ropa para lanzar el servicio en España el pasado mes de diciembre. Se dirigen únicamente a mujeres que, como adelantaba González, necesitan lucir distintos looks regularmente. Después de rellenar un test de estilo –color de pelo u ojos, talla y gustos– para afinar al máximo los envíos, la primera caja que reciben las clientas es sorpresa, pudiendo elegir entre diferentes propuestas en las siguientes. Además, las prendas se pueden cambiar durante el mes sin costo adicional.

“Principalmente nos piden ropa más o menos formal para diario y para eventos especiales, alguna cena, eventos o fiestas, y para salir el fin de semana”, apunta el CEO de Ecodicta. “También ofrecemos la posibilidad de probar nuevos estilos y nuevas marcas. A veces nos dicen, este mes me gustaría probar algo más atrevido que a lo mejor no me compraría”, añade.

En resumen, “es un armario que vas eligiendo tú o una especie de armario que vas compartiendo con otras chicas”, afirma González. “En el precio está incluido el lavado, el transporte, un seguro por si se rompe la ropa de forma natural, como por el uso y el desgaste, y el servicio de personal shopper”, explica. De momento, tienen 50 suscriptoras, cifra que esperan haber triplicado a finales de 2019.

Trabajan principalmente con marcas españolas e internacionales de moda sostenible o premium con la idea de alargar la vida de las prendas. “Pensamos que, si la ropa ya está fabricada y si es duradera, ya es sostenible. Hay diversos criterios de sostenibilidad como la durabilidad, que sea hecha en proximidad porque reduce el transporte y la fabricación con productos sostenibles. Unas marcas cumplen unos criterios y otras marcas cumplen otros”, señala González, que enumera algunas de ellas.

Entre las premium, Ecodicta ofrece prendas de Ralph Lauren, Bimba y Lola, Hugo Boss, Michael Kors o Maje. Entre las sostenibles locales, tienen ropa de Hupit, que utiliza seda libre de crueldad animal; o Roca Mood, que confecciona sus prendas con tencel, material procedente del eucalipto, desde su tienda-taller en el madrileño barrio de Chamberí. “La ropa es nuestra. Tenemos acuerdos con marcas y vamos comprando y aprovechamos ventas especiales o stock para evitar que se destruyan o se envíen a países en vías de desarrollo, destruyendo el tejido local”, cuenta González.

Desde Ecodicta no recomiendan lavar las prendas y, de hacerlo, seguir las instrucciones de las etiquetas de manera estricta. Ellos lavan la ropa utilizando otro servicio de suscripción, Telelavo, que utiliza un sistema de lavado artesanal. Cada prenda se alquila un máximo de 20 veces. Y envían las cajas a través de Correos a España peninsular, Baleares y Portugal.

Con apenas seis meses de vida, Ecodicta sigue siendo un negocio en el que es necesario invertir. “Dará frutos a medio y largo plazo. Además, queremos hacer más cosas como ampliar marcas, hacer eventos, trabajar la comunidad de clientas para hacer cosas divertidas” o explorar el negocio de la ropa de segunda mano, comenta González, que abunda en su filosofía diciendo: “Partimos de la base de que la prenda que menos contamina es la que ya está fabricada. Entendemos que es una necesidad estar cambiando de ropa, que también es divertido y que define nuestra cultura y no queremos renunciar a ello. Pero también queremos reducir la compra de fast fashion y su huella ecológica, la ropa barata que se usa pocas veces y se desecha porque es la que más contamina en todo su proceso de producción”.

La industria de la moda es la segunda más contaminante del mundo solo por detrás del petróleo. De manera que es imprescindible repensar cómo consumimos ropa. La propuesta de Ecodicta: “La idea es que la gente compre ropa de calidad, ropa que les va a durar, para tener un fondo de armario fijo, estable, versátil y duradero. Y que una parte de ese armario que igual tenía la necesidad o el deseo de comprar por diversión la alquile, dando un empujón hacia armarios más sostenibles”, concluye González.