7 ciudades en Europa que visitar con poco presupuesto
Aquí un ranking de ciudades europeas que visitar con un presupuesto ajustado sin renunciar a un viaje mágico, para cuando la pandemia lo permita.
En esta época atípica es frecuente pensar en los lugares que nos gustaría visitar cuando la pandemia[contexto id=»460724″] lo permita. Sin embargo, puede que no nos encontremos en la mejor situación financiera o que simplemente no deseemos gastar demasiado dinero. Pero a la hora de descubrir mundo, la cartera no tiene por qué ser un impedimento
La pluralidad del continente europeo permite viajar a lugares que son baratos para los españoles por variables como los costes del nivel de vida o el valor del euro sobre otras monedas. Por eso, hemos hecho nuestro particular ranking de ciudades europeas que visitar con un presupuesto ajustado sin renunciar a un viaje mágico.
7. Liubliana
Sus numerosas esculturas de dragones o su icónico castillo del siglo XII convierten a la capital de Eslovenia en una experiencia enriquecedora. Liubliana es una ciudad muy romántica para los eslovenos, que identifican el amor con el río Ljubljanica. Este río tiene zonas subterráneas, con lo cual en algunas partes no se puede ver. Los eslovenos dicen que el amor es igual porque viene y va, pero siempre está ahí. Un paseo en barco por su romántico río es un plan perfecto para celebrar el amor. Qué mejor lugar para perderse que esta pequeña capital europea que puedes conocer en un par de días.
6. Vilna
La capital de Lituania es una gran desconocida que alberga edificios de múltiples estilos arquitectónicos, entre los que destacan el barroco de la antigua ciudad medieval o el gótico, por la importancia de la Iglesia de Santa Ana. Los hoteles de tres estrellas tienen un precio medio por debajo de los 40€ para dos personas por noche. En dos días se recorre con facilidad. La Avenida Gediminas es un lugar con mucha vida donde se reúnen artistas callejeros, turistas y locales, no deja indiferente a nadie.
5. Cracovia
Cracovia es una oportunidad para descubrir Europa a un precio irrisorio. Conocida por ser una de las ciudades polacas más bellas, se estructura en torno a la Plaza del Mercado. En ella se hallan varios monumentos destacados como la Basílica de Santa María y la Lonja de Paños. Destaca que las dos torres de la basílica sean de diferentes tamaños y estilos: la más alta, de 81 metros, tiene un tejado de estilo gótico, mientras que el de la menos elevada, de 65 metros, es de estilo renacentista. Para ver Cracovia basta con tres días, pero es habitual extender la visita un par de días más y descubrir en sus alrededores las minas de sal de Wieliczka y el campo de concentración de Auschwitz.
4. Praga
La capital de la República Checa es un lugar en el que se puede sentir la magia de un cuento sin salir de Europa. También conocida como «la ciudad de las cien torres», es una visita imprescindible para los músicos. El papel de la música en Praga se puede divisar desde sus pequeños souvenirs hasta en el espectáculo del cambio de guardia del antiguo Palacio Real. Esta ceremonia tiene lugar en el complejo del Castillo de Praga que, al contrario de lo que su propio nombre indica, no es solo un castillo sino que alberga toda una ristra de monumentos: la Catedral de San Vito, la Basílica de San Jorge o el Callejón de Oro son solo algunos de ellos. Cruzando el impresionante puente de San Carlos se contemplan numerosas estatuas que amenizan el paseo hasta la Torre del Reloj Astronómico.Tres días son más que suficientes para conocer a fondo la ciudad. Tras contemplar sus monumentos, por solo 5€ puedes descansar y tomar un cóctel en una hamaca a orillas del río Moldava.
3. San Petersburgo
La ventana a Europa tiene un hueco en el podio. Aunque pueda parecer un destino caro, lo cierto es que por menos de 5€ se puede disfrutar de un menú diario típico.
La colorida Iglesia del Salvador sobre la Sangre Derramada es todo un símbolo de la ciudad de San Petersburgo que hay que visitar al menos una vez en la vida. Incluso el metro es una obra de arte, pues esconde lujosos pasillos y columnas que hacen que muchas de sus estaciones merezcan el sobrenombre de ‘Palacios del Pueblo‘. En cuatro días se puede disfrutar de sus principales monumentos sin apuros: el Palacio de Invierno, el Museo Hermitage o el Palacio de Catalina.
2. Budapest
El segundo puesto del ranking es para la capital de Hungría. El Danubio es el protagonista de la ciudad. El Puente de las Cadenas, que data del siglo XIX, une las dos antiguas ciudades de Buda y Pest, situadas en el lado occidental y oriental del Danubio, respectivamente. Aunque ambas urbes se fusionaron en 1873, se observan diferencias notables entre ellas. Buda está relacionada con la clase alta, mientras que Pest es el hogar de la mayoría de la población y el núcleo del ocio.
El precio medio de una noche en un albergue en el centro de la ciudad es de entre 10 y 12€. Asimismo, hay hoteles de cuatro estrellas por unos 80€ por pareja. El florín húngaro permite que la estancia en Budapest sea muy asequible para los turistas cuya moneda de origen es el euro, ya que un euro equivale a 364 florines.
Para recorrer Budapest, lo mejor es llevar un calzado cómodo que permita sobrellevar las caminatas por el distrito montañoso de Buda. En tres días se puede visitar lo imprescindible: el Parlamento de Hungría, el Bastión de los Pescadores o el Castillo de Buda. Sin embargo, es probable que necesites más tiempo para otras experiencias inolvidables como relajarse en los Baños Széchenyi o recorrer el Danubio en un crucero nocturno.
1. Estambul
La Sublime Puerta encabeza la lista de lugares que visitar cuando quieres disfrutar de unas vacaciones por todo lo alto sin que el bolsillo sufra las consecuencias. En Estambul se puede cenar en un restaurante de lujo por el módico precio de 25€ por persona. El restaurante Ruby es una visita obligada para cenar y disfrutar de unas magníficas vistas al Cuerno de Oro.
Desde lo alto de la Torre Gálata se contemplan unas vistas maravillosas a toda la ciudad de Estambul. Se distingue a simple vista el lado europeo del asiático. En el skyline destacan los minaretes de las mezquitas, como no podría ser de otra manera, ya que es la región de Turquía en la que más hay y también la más habitada, con 15 millones de habitantes.
En esta gran urbe, Hagia Sophia es la joya de la interculturalidad: una antigua basílica ortodoxa, convertida después en mezquita, luego en museo y de nuevo en una mezquita desde 2020.
Para conocer los mejores secretos de Estambul, es recomendable pasar allí unos cuatro días. Comprar en el Gran Bazar, visitar la Mezquita Azul o disfrutar de un crucero por el Bósforo son otras experiencias que no pueden faltar en una visita a la única ciudad del mundo que se encuentra entre dos continentes.