España, Portugal y el realismo mágico de la Raya

En el siglo XIII se dictamina que 1292 kilómetros recorrerán la frontera que une España y Portugal. De esa línea surge la Raya y sus habitantes se hacen llamar rayanos.

En Un viaje por la Raya (El paseo, 2021) el profesor y periodista José Ramón Alonso de la Torre nos narra y dibuja una línea como puente entre culturas, una exploración que descubre, pueblo a pueblo, las riquezas que se encuentra en los bordes de una línea imaginaria que se pacta para que creamos que en ese territorio hay dos países y dos culturas distintas, ya que como afirma César Rina en el epílogo, no fue hasta el siglo XIX que se firmó un tratado que instaurara un orden fronterizo.

A pesar de las firmas y los tratados, Alonso de la Torre transita el pacto, ese que se implantó imaginariamente en el siglo XIII para caminarlo cual Robert Walser. Entre observaciones, anécdotas, testimonios y caminatas, la crónica se ve acompañada por fotografías -tomadas por Esperanza Rubio- que desvelan diferentes parajes y personajes, hasta los atracones de mariscos del autor en Badajoz a las francesinhas o la carne de cabrito y baba de camelo en Castelo Novo. Alonso de la Torre es un cronista que no deja de atracarse para recomendar, la comida lo deja lleno para seguir el viaje, pero igual se desempacha y lo continua, para así seguir comiendo, recomendando y narrando lo principal: que los rayanos, a pesar de esa raya imaginaria y limitante, siempre han existido y se sienten unidos identitariamente.

De Ayamonte hasta las murallas de Valença do Minho se marca la ruta de este viajero que no es turista sino un emocionado explorador, que narra con pasión una historia poco contada quizás porque la Raya ha sido vista como un eje de subdesarrollo económico a diferencia de la riqueza de sus costumbres. En un bar de Trevejo en la Sierra de Gata, Alonso de la Torre escucha las voces de los viajeros y oriundos y reconoce cómo con el tonillo cantarín extremeño “se mezclan la e y la o al final de la palabra con la fuerza del alemán, las palabras del inglés o el acento belga del francés». ¿Acaso esa mezcla no es tan rica como el intercambio de acciones de la bolsa?

José Ramón Alonso de la Torre trae al ahora historias antiguas que marcan el presente de los pueblos que recorre, desde una villa marinera cuya prosperidad proviene de la emigración puertorriqueña hasta las historias sobre el contrabando tradicional de café desde Portugal a España. 

Los mitos y leyendas recorren el pueblo rayano, especialmente las del contrabando. Desde la historia que aparece al inicio del famoso libro de Nacho Carretero, Fariña, donde un ciclista contrabandea carbón hasta la historias de los burros traficantes, «asnos a los que los contrabandistas apaleaban disfrazados de guardias’», para luego llevar tabaco, café, plátanos o motores Barreiro y, al encontrarse con un verdadero guardia civil o “guardinha” corrían despavoridos por los pueblos entre Santiago y Tourem. Quizás esta historia, algo cruel con los pobres burros, sería censurada hoy, sin embargo, creó una tradición que enaltece a los contrabandistas como seres valientes y sagaces pero sobre todo, que la Raya, esa línea imaginaria, no existía para sus habitantes.

Un viaje por la Raya es una crónica para viajar por esa línea imaginaria en la que su autor sucumbe e invita a otros a sucumbir ante ella.