Puy du Fou: Toledo abre el umbral a un viaje mágico por el pasado
El parque temático recorre la historia española a través de una experiencia construida con espectáculos de dimensiones colosales
A 10 kilómetros del Alcázar de Toledo, en el corazón de Castilla-La Mancha, hay unas coordenadas de 30 hectáreas donde se combinan la pasión por la historia y la innovación creativa. Puy du Fou Toledo es un parque temático que propone un viaje en el tiempo, una inmersión en un universo donde la contaminación visual y publicitaria del siglo XXI quedan fuera. El Cid, Lope de Vega, Miguel de Cervantes, Cristóbal Colón, Isabel la Católica, protagonistas de esta travesía, y también personajes secundarios, no por ello cruciales también, habitan Puy du Fou, sus caminos, sus poblados medievales, y su corral de comedias. En este parque temático no hay cinturones de seguridad, cascos ni montañas rusas. La emoción proviene de la sorpresa y del modo de narrar la historia con sofisticados y precisos dispositivos técnicos y artísticos en varios escenarios, entre los que se encuentra el más grande de España, donde se representa El sueño de Toledo.
En 1978 se inauguró en Francia, próximo al castillo renacentista Puy du Fou [el nombre proviene del francés antiguo y no tiene traducción literal; podría pensarse en castellano como «la colina de las hayas», o bien traducirse fou como «loco»], Cinéscénie, el espectáculo más grande del mundo, donde se hila la historia del país desde la Edad Media hasta la Segunda Guerra Mundial. Luego se sumaría el parque temático Puy du Fou, en 1989, y con él, más espectáculos, todos ellos diseñados para emocionar a grandes auditorios a través de dispositivos escénicos novedosos. Fue Philippe de Villiers (1949), vizconde, escritor, quien ha sido Secretario de Estado, diputado de Francia y diputado del Parlamento Europeo, quien impulsó la creación de este parque, el segundo más visitado del país después de Disneyland París.
En Toledo se advierten las huellas de la cultura cristiana, musulmana y judía. Esta ciudad donde convergen estos protagonistas de la historia española resulta ideal para esta experiencia que es cultural y pedagógica, pero que no cae en los vicios de la solemnidad o del estatismo. La historia abraza al espectador y lo invita a sumergirse en aquellos relatos, mitos y leyendas, así como también en un recorrido de cuidada estética (desde el modo en el que se señalan las plazas del parking, hasta el packaging de los alimentos, etc.) construcciones medievales y renacentistas, ventas, tiendas y talleres.
El 20 de agosto de 2019 se estrenó El sueño de Toledo, un espectáculo que fue presentado a personalidades de los medios, la cultura y autoridades políticas. El sueño de Toledo fue diseñado por Erwan de la Villeon, consejero delegado de Puy du Fou España, el guionista y director de todos los espectáculos. Durante 80 minutos el espectador ingresa en el relato del viejo Azacán de Toledo, quien le narra a María, una joven lavandera, siglos de historia acaecidos a orillas del Tajo, desde los visigodos hasta la Guerra Civil. Comienza así una sucesión de escenas/episodios de la historia, generosos en recursos de iluminación, dispositivos escenográficos que guardan varios secretos y sorpresas –no se develarán en este reportaje–, y musicales (los parlamentos de los personajes no son en vivo, sino que han sido grabados previamente).
Imagen de ‘El sueño de Toledo’ vía Puy du Fou.
Hay un equilibrio perfecto de coordinación en una maquinaria representado por actores que son también virtuosos bailarines. Jotas castellanas, danza árabe, charlestón, danzas del Renacimiento, americanas, solo por nombrar algunas, le aportan dinamismo a un espectáculo que visita los principales capítulos de la historia española que tuvieron a Toledo como testigo. Además de animales en escena, los fastuosos trajes de los intérpretes crean un imponente espectáculo con un despliegue visual que desborda color y movimiento.
En Puy de Fou más de 300 actores, jinetes y acróbatas despliegan su talento y, entre ellos, 200 forman parte de El sueño de Toledo. Otros espectáculos integran la oferta Puy du Fou Toledo. El último cantar recorre la vida del Cid Campeador, un personaje a quien los siglos y la posmodernidad no olvidan a través de series y de versiones de este héroe, como la reciente Sidi, de Arturo Pérez-Reverte. Nuevamente, no se quiere estropear una sorpresa que se guarda aquí para el espectador, un hecho que incluso para el público más experimentado y asiduo de representaciones será novedosa. La fórmula es siempre la misma: más es más. Un estímulo visual que nunca baja los brazos donde el espectador pareciera estar literalmente viajando y sumergido en esta historia.
También resulta atractivo, para los amantes del Siglo de Oro, A pluma y espada. Lope de Vega, convertido hoy en mito por su vida plagada de romances y aventuras, muchas de ellas al margen de la ley, es el protagonista de esta pieza que exige una gran destreza física a sus intérpretes. En Allende la Mar Océana el visitante ingresa en una carabela dentro del primer viaje de Cristóbal Colón a las Indias, desde su audiencia con Isabel la Católica, hasta la incertidumbre en alta mar del genovés y de la tripulación, visitados por las criaturas de los bestiarios medievales, la desesperación, los mareos y las nauseas. En Cetrería de reyes, el espectador viaja al califato de Córdoba donde se encuentran Abderramán y el castellano Fernán González. En esta pieza las aves (búhos, águilas, cigüeñas, etc.) son las protagonistas de esta gesta.
Todos los espectáculos, salvo El sueño de Toledo, duran media hora, y tienen dos funciones diarias [se recomienda al visitante planear la visita y los horarios de cada actividad a la que desean asistir; hay visitantes que solo acuden al espectáculo nocturno, pero la mayoría combina la visita al parque durante el día y cierra la jornada con su asistencia a la representación El sueño de Toledo]. También recorren el parque durante todo el día personajes de la historia toledana, como el pregonero o el sereno, quienes cuentan sus historias a los visitantes.
Según estimaciones de los organizadores a The Objective, se prevé que esta temporada que comenzó el 27 de marzo y se prolongará hasta el 1 noviembre 2021, aún a pesar de estar atravesada por una «quinta ola» de la pandemia, el parque reciba 600 mil visitantes. En Puy du Fou España trabajan 687 personas, un personal que está integrado por artistas, personal de servicio, los «mangas verdes», atentos a la seguridad y a la organización de los eventos, etc. La primera fase de inversión (2018-2021), para crear el parque en este árido terreno y El sueño de Toledo, consistió en un desembolso de 183 millones de euros, cifra que aumentará hasta los 242 millones de euros con las siguientes fases creativas que se sucederán hasta el año 2028.
Los organizadores no pueden adelantar sus planes, pero sí confirman que hay planes de crecimiento y el deseo de seguir sumando en el futuro propuestas a este parque. Puy du Fou es una experiencia que llegó para quedarse y para convertirse en un clásico.