Carmena une para siempre a Raphael y Almodóvar

El cineasta Pedro Almodóvar y el cantante Raphael ya pueden tachar de la lista uno de sus deseos por cumplir. Ambos han recibido el título de Hijo Adoptivo de Madrid, entregado por la alcaldesa, Manuela Carmena, para los dos «un sueño» cumplido.

En una ceremonia que ha tenido lugar en el Salón de plenos de la Casa de la Villa, los dos condecorados han asistido acompañados y arropados de amigos y compañeros de profesión como Penelope Cruz, Marisa Paredes,  Leonor Watling, Elena Anaya o Mario Vaquerizo y Alaska. También se han dejado ver personalidades políticas como el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, o el exministro socialista José Bono.

«Madrid más que una ciudad es algo que está vivo, es un personaje», cuenta Almodóvar ante un puñado de periodistas tras recibir la medalla y firmar en el Libro de Honor que lo convierte oficialmente en nuevo Hijo Adoptivo de la capital de España. Un título aprobado por unanimidad por todos los grupos municipales.

Aunque nacido en Calzada de Calatrava, Ciudad Real, en su adolescencia Almodóvar viajó a Madrid para nutrirse de todo aquello que la ciudad madrileña podía ofrecer al que se convertiría en un referente del cine español. «Siempre soñé con vivir en Madrid. Para un niño manchego, esta era la ciudad de la libertad, de los cines, del teatro, de los videoclubs…». «Ser hijo adoptivo es como si en un día sensible tu madre te abraza y te dice que te quiere», apunta el cineasta, que cuenta cómo uno de sus primeros recuerdos de la capital es el olor «ni bueno ni malo del metro, pegajoso», además del pelo largo de los hippies de Santa Ana.

«Tanto yo como mis personajes seguiremos viviendo aquí», asegura después de hacer un repaso por aquellas películas cuyo escenario principal ha sido suelo madrileño como ‘Mujeres al borde de un ataque de nervios’ o ‘La flor de mi secreto’, contribuyendo a incrementar el conocimiento de la ciudad por todo el mundo.

Almodóvar también ha apuntado que en verano comenzará a rodar su nueva película, de la que no ha dado más detalles.

Para Raphael, que llegó a Madrid desde Linares, Jaén, con tan sólo nueve meses, su primer recuerdo es el día que, con sólo tres años y medio, entró en la Iglesia de San Antonio para hacer una prueba para poder formar parte del coro. «Una vez más compruebo que los sueños pueden hacerse realidad«, apunta visiblemente emocionado. «Tengo mucha suerte, he sido premiado en muchos países pero éste es el más deseado para mí desde hace mucho tiempo», asegura el cantante, que recuerda cómo en Madrid –su «ciudad talismán»– tuvieron lugar las cosas más importantes de su vida, como la grabación de su primer disco, su primera obra de teatro, su primer concierto, el nacimiento de sus hijos y sus ocho nietos y, por supuesto, el conocer a Natalia, su mujer, a la primera que contó que iba a recibir esta condecoración. «Soy un artista andaluz, europeo, del mundo y ahora también Hijo Adoptivo de Madrid», dice orgulloso.

Por su parte, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha apuntado que “si Raphael deseaba ser hijo adoptivo, más lo deseábamos en este ayuntamiento”, asegurando que las canciones del «risueñor de Linares”,  –así se refiere al artista andaluz– “forman parte del ADN cultural y sentimental de millones de personas de todo el mundo”.

En cuanto al director de cine Pedro Almodóvar, a quien la regidora ha definido como «un atrevido Don Quijote que ha vencido molinos en Gran Vía», ha agradecido «no hacerse cineasta francés o no irse a vivir a Manhattan», porque con su cine «ha hecho grande a la ciudad de Madrid».

Con estos dos nombramientos, ya son 22 las personalidades de las más diversas disciplinas que desde 1980 han recibido esta distinción que otorga el Ayuntamiento de Madrid para reconocer a quienes, sin haber nacido en Madrid, han destacado por «sus beneficios a la ciudad» a través de su «prestigio y cualidades personales». En esta lista figuran personalidades como el rey Juan Carlos I,  Adolfo Suárez, Camilo José Cela, Mario Vargas Llosa o Rafa Nadal.