Mercados cubiertos: diversificarse o morir
Los mercados cubiertos son una parte tradicional y entrañable de la vida urbana española, que humanizan y a la que dan más encanto, ¿cuándo fue la última vez que visitaste uno?
Los mercados cubiertos, perdida la batalla contra los supermercados y las grandes superficies, se esfuerzan por sobrevivir dedicando a nuevas actividades los puestos que se van quedando vacíos, de manera tristemente inexorable, con la jubilación o el abandono de unos propietarios que no encuentran sucesores. Las tascas, bares y casas de comidas de todo tipo han sido hasta ahora la solución más exitosa, sobre todo en mercados de tamaño medio: los más grandes, o mantienen una gran vitalidad comercial –como La Boquería en Barcelona o Maravillas en Madrid- o se convierten poco a poco en cavernas cada vez más vacías: por ejemplo, el declive del Mercado de la Cebada madrileño ha resultado, durante años, desolador. Y, no lo olvidemos, los mercados son de titularidad municipal.
La nueva administración regional madrileña ha prometido ayuda tecnológica para mejorar en la ansiada revitalización. A la espera de que se precise en qué va a consistir y de que se compruebe si resulta eficaz, por ahora lo que se puede hacer es conocer los mercados que más éxito han tenido en su transformación, disfrutarlos, comprar y comer en ellos, y quizá sacar conclusiones. En cualquier caso, son una parte tradicional y entrañable de la vida urbana española, que humanizan y a la que dan más encanto.
En la capital parece que el modelo más exitoso hasta ahora es el del Mercado de Vallehermoso, que ha conseguido que puesto de degustación como Craft 19, Tripea o Kitchen 154 sean conocidos por todos los aficionados serios de la ciudad. Y no digamos el plus que es contar con la pollería más prestigiosa de España, la de Higinio Gómez.
No muy lejos está el Mercado de Chamberí, cuyo concepto –liberar cerca de la mitad de su espacio para un patio rodeado de puestos gastronómicos y con mesas altas en el centro-, La Chispería, promovida por la cadena de bares y tascas andaluces Lambuzo –que en el mercado tiene una tienda, no un puesto de degustación- ha tardado más en despegar y de hecho ha sufrido una gran volatilidad de aperturas y cierres. Se empieza a hablar algo de Juancho’s BBQ, su nuevo puesto de carne roja. Por falta de originalidad que no quede: hay hasta un puesto de comida italomexicana.
El pequeño Mercado de la Paz disfruta de su situación en el barrio de Salamanca, pero también ha tenido que diversificarse. Muy notables el restorantito y la tienda de Matteo De Filippo, que fue el chef de la embajada de Italia en Madrid.