Bob Pop cuenta su violación para apoyar a la víctima de 'La Manada'
A Roberto Enríquez lo violaron en el parque de El Retiro de Madrid hace 25 años. Recuerda la desorientación, la falta de ropa y la colaboración de unos operarios de un camión de basura que le prestaron una bolsa para cubrirse.
A Roberto Enríquez lo violaron en el parque de El Retiro de Madrid hace 25 años. Recuerda la desorientación, la falta de ropa y la colaboración de unos operarios de un camión de basura que le prestaron una bolsa para cubrirse. Recuerda la vergüenza, la incredulidad y la ayuda de una pareja que lo acompañó a comisaría de policía. Pero, sobre todo, recuerda cómo al día siguiente conseguía, a veces, reírse y, a ratos, salir con sus amigos. A Bob Pop lo violaron y lo desvalijaron una noche de verano, pero siguió adelante.
«Lo pasé muy mal y fue una mierda y vomité, y me dio todo mucho asco, y lloré, pero al día siguiente y los siguientes días, me reía, salía con amigos, hacía cosas, porque había un subidón. Además del dolor, había un subidón porque cuando crees que te van a matar y sigues vivo, está de puta madre«, sostuvo el crítico de cine en el programa Latemotiv, que dirije Andreu Buenafuente y donde es colaborador.
#LateMotiv306 Para los que se permiten juzgar a una víctima de la agresión de una manada o de un solo hijo de puta. Para vosotros. pic.twitter.com/r1ZDQTD2be
— Late Motiv #0 (@LateMotivCero) 21 de noviembre de 2017
«Es un buen momento para que la gente que se permite juzgar cómo se puede sentir una víctima de una manada de hijos de puta o de un solo hijo de puta, que esa gente sepa que los siguientes días a eso claro que estás hecho un asco, porque es una putada. Pero también te tienes que reír, que salir, que hacer cosas, porque lo más importante y lo más fabuloso de todo es que has sobrevivido«, terminó entre los aplausos generalizados del público.
Así de claro lo contó Bob Pop: lo más importante de todo es que seguía vivo, lo habían violado, sí, pero seguía vivo.
El discurso del crítico televisivo tiene ahora una especial relevancia. Estos días está teniendo lugar en Pamplona el juicio contra cinco jóvenes sevillanos acusados de haber violado a una chica durante los Sanfermines de 2016. El caso se está desarrollando en medio de la polémica, especialmente, después de que se conociera que la defensa había contratado en julio a un detective privado para que siguiera a la joven después de la violación. El objetivo de esta vigilancia era demostrar que ella hacía una vida normal. Como si eso quitara culpa a los culpables.
Para ellos, para los que creen que una víctima es menos víctima por tratar de seguir adelante después de una violación, es este mensaje de Bob Pop.