¿Por qué el Mundial de Rusia beneficia a los traficantes de personas?
El Mundial de Rusia es uno de los eventos más esperados del año. Los seguidores de las selecciones nacionales que participan viajarán miles de kilómetros para ver a sus jugadores favoritos en el campo y, a la vez, hacer algo de turismo por ciudades como Moscú y San Petersburgo.
El Mundial de Rusia es uno de los eventos más esperados del año. Los seguidores de las selecciones nacionales de fútbol que participan viajarán miles de kilómetros para ver a sus jugadores favoritos en el campo y, a la vez, hacer algo de turismo por ciudades donde se disputarán los partidos, como Moscú y San Petersburgo.
Viajar a Rusia supone habitualmente la necesidad de un visado y, por tanto, un gasto extra. Para facilitar el viaje a todos estos visitantes, Rusia relajará los controles de visado durante los días que dure el campeonato para que todos aquellos que tengan una entrada para un partido y un Fan ID, un documento de identidad que los aficionados pueden solicitar tras obtener una entrada y que permite entrar al país sin visado, puedan disfrutar de unos días en el país sin necesidad de pasar por los trámites habituales.
Esta medida es una gran noticia para los fans del Mundial, pero también para los traficantes de personas, que planean explotar esta situación para introducir a mujeres nigerianas en el país y venderlas como prostitutas. Así lo han denunciado varias asociaciones contra la esclavitud y las autoridades nigerianas, que aseguran que los traficantes de personas tienen un plan para introducir a estas mujeres en Rusia durante los días que dura el Mundial.
Los planes de los traficantes
La Agencia Nacional para la Prohibición del Tráfico de Personas (NAPTIP, por sus siglas en inglés) ha recibido información sobre los planes de los traficantes para aprovechar el Mundial de Rusia para llevar a mujeres al país y obligarlas a prostituirse. Como medida preventiva, se ha puesto en contacto con la embajada rusa en la capital nigeriana, Abuja.
Los servicios de inteligencia no han podido determinar la cantidad de mujeres que se pueden ver afectadas por esta situación, pero lo que sí saben es que esto ha ocurrido más veces. Este sistema de entrada al país sin visado se probó durante la Copa Confederaciones, y los activistas denuncian que los traficantes de personas se aprovecharon de esta circunstancia.
“Descubrimos que alrededor de 30 víctimas fueron llevadas a la Copa Confederaciones en Moscú el año pasado”, afirma la activista Julia Siluyanova, de la organización contra la esclavitud Alternativa, en declaraciones a Reuters. “Esperamos que nos vamos a encontrar el mismo problema durante el Mundial este año”, añade.
“Esto es un verdadero regalo para los traficantes”, denuncia Siluyanova.
Por su parte, la FIFA ha asegurado que está comprometida con asegurar que se respeten los derechos humanos. Sin embargo, considera que los crímenes como el tráfico de personas son responsabilidad de las autoridades locales e internacionales, dijo un portavoz de la federación.
La prostitución en Rusia
Ser prostituta en Rusia es una profesión de alto riesgo. Las trabajadoras sexuales, a menudo obligadas a ejercer esta actividad, están expuestas a una gran cantidad de peligros debido a la falta de protección que existe en el país. Violaciones, secuestros, palizas y amenazas son algunas de las situaciones a las que se enfrentan casi a diario.
La prostitución es ilegal en el país, aunque está sancionada con una multa simbólica de unos 1.500 rublos (unos 20 euros). Además, es habitual que los policías no hagan caso de las denuncias de las prostitutas, e incluso acaben siendo ellas las sancionadas por ejercer una actividad ilegal.
En teoría, los proxenetas pueden ser condenados a penas de hasta tres años de cárcel por esta actividad, pero muy rara vez se imponen estas condenas, oficialmente por la dificultad de encontrar pruebas, aunque las prostitutas a menudo denuncian que se debe a una red de policías corruptos que los protegen.
“Las prostitutas en Rusia no tienen ninguna posibilidad de defenderse”, explica Irina Maslova, la fundadora de La rosa plateada, la única asociación del país que ayuda a estas mujeres.
“Yo fui secuestrada tres veces mientras trabajaba como prostituta en Rusia, y violada durante varios días por mis secuestradores”, narra a la Agencia Nigeriana de Noticias Blessing Atale, una chica de 25 años que volvió a Nigeria tras seis años viviendo en Rusia, donde era obligada a prostituirse para pagar la deuda a los traficantes que la llevaron hasta allí.
El drama de las inmigrantes nigerianas
Miles de mujeres y niñas nigerianas son atraídas hacia Europa cada año con promesas falsas sobre la vida que allí conseguirán. A menudo corren grandes riesgos al cruzar desde Libia hasta Italia, donde al menos cuatro de cada cinco de estas mujeres son forzadas a prostituirse en diferentes lugares de Europa, según los datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
El tráfico de mujeres nigerianas es un problema cada vez más preocupante, y Rusia es solo uno de los destinos a los que llegan cada año por las redes mafiosas que las someten a un trato cruel e inhumano. Solo en 2016, más de 11.000 mujeres llegaron a Italia desde Nigeria, de las cuales alrededor del 80% fueron llevadas hasta allí por traficantes de personas con la intención de forzarlas a prostituirse. Esta cifra es casi el doble que en 2015, cuando llegaron a Italia 5.600 mujeres nigerianas, casi ocho veces más que en 2014.