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Cuando la avispa asiática hizo buena a la autóctona

El picotazo de avispa asiática «no es más peligroso que la de la autóctona», aseguran los expertos tras tres fallecimientos por picadura de avispa.

Cuando la avispa asiática hizo buena a la autóctona

En las últimas semanas tres personas han fallecido en Galicia por la picadura de una avispa. La última fue el pasado 23 de julio, cuando un hombre de 65 años fallecía en San Cristovo de Cea (Ourense) a causa del veneno de este animal. Los otros dos fallecimientos se producían apenas una semana antes en Viviero (Lugo) y también en San Cristovo de Cea tras recibir varios picotazos de este insecto. Las tres víctimas tenían algo en común: eran alérgicos al veneno de los himenópteros. 

De los fallecidos, dos recibieron la picadura de una avispa autóctona y uno de la invasora asiática, a la que han bautizado como «avispa asesina» o «letal» generando una gran alarma social. Pero la realidad, es que el picotazo de avispa asiática «no es más peligroso que la de la autóctona». Así lo ha asegurado Virginia Carracedo, profesora ayudante doctora del departamento de Geografía, Urbanismo y Ordenación del Territorio de la Universidad de Cantabria, durante el encuentro ‘La avispa asiática (vespa velutina): características, impactos y soluciones’.

Foto: Mathew Schwartz/Unsplash

Lo que realmente está ocurriendo, según los expertos, es que la asiática ha crecido en número espectacularmente en los últimos años en la comunidad gallega desde que en 2011 hiciera su aparición en Burela (Lugo). Y es que hay que tener en cuenta que mientras que un nido de avispa autóctona puede contener hasta 50 bichos, uno de avispa asiática puede contener hasta 15.000. De esta forma, a mayor avispas velutinas, mayor posibilidad de que te pique una de estas, mayor posibilidad de que pique a una persona alérgica y mayor posibilidad de que alguien muera. Según datos proporcionados a este periódico por la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), el 3% de la población sufre reacciones alérgicas generalizadas por el veneno de avispas y abejas, y la tasa de mortalidad anual se estima en un 0,08 por millón de habitantes, lo que significa que unas tres o cuatro personas podrían fallecer cada año por esta causa.

Llegada a Europa

Al parecer, la avispa asiática llegó a Europa, en concreto a Francia, en 2004 en un barco mercante procedente de China. Desde entonces, han abarcado unos 120.000 km2 y atacado colmenas autóctonas causando importantes daños y alarma social en los lugares afectados y ocupando más del 80% del territorio francés. Y de Francia, a Italia, Portugal, Reino Unido, Alemania, Bélgica, Suiza y España, donde se han podido ver no sólo en Galicia, sino también en Cataluña, Castilla y León, Cantabria y País Vasco.

Foto: Matheus Queiroz/Unsplash

¿Por qué las muertes se han producido ahora y sólo en Galicia?

Según la SEAIC, en Galicia parece que han encontrado su lugar perfecto por el carácter rural de esta comunidad. Y es que hay que destacar que los tres fallecidos se encontraban realizando trabajos en el campo de desbroce.

Además, hay que tener en cuenta que estos insectos están ahora más activos que nunca con la llegada del calor y el verano. Época en la que los nidos crecen y, también, época en la que las personas pasan más tiempo en el campo y hacen más actividades al aire libre.

La alergia que mejor se cura

La vacunación con veneno de himenópteros es la forma de tratamiento con inmunoterapia más eficaz, efectiva en más de un 90% de los casos. Sin embargo, no se dispone de una prueba que, aplicada a la población general, determine qué individuos manifestarán alergia tras una picadura. Por lo tanto, para conocer si eres alérgico o no al veneno de estos animales deberás acudir al médico de manera inmediata en el momento del picotazo, recomiendan desde la SEAIC, que aconsejan que tras el ataque de uno de estos bichos apliquemos hielo en la zona y acudamos a urgencias si aparecen síntomas más allá del dolor o picor local.

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