Flight Simulator de Microsoft: así es lo nuevo de la franquicia más antigua de un videojuego

Los fans del simulador de vuelo más antiguo y más famoso del mundo están de enhorabuena: ya está disponible el nuevo Flight Simulator de Microsoft. El juego, que está disponible para PC en tres versiones –con un precio que va de los 83 a los 142 dólares, dependiendo de la cantidad de modelos de aviones que incluye cada una– es lo último de la franquicia más antigua de un videojuego.

Aparecido en el mercado por primera vez en 1982, el Flight Simulator fue uno de los primeros programas producidos por Microsoft. Para poner en relieve esto, un dato: en aquel momento, la empresa de Bill Gates todavía no había estrenado su sistema operativo, Windows, seguramente el producto más legendario de la compañía. La última versión de este simulador llega 14 años después del anterior y lo hace de la mano del estudio francés Asobo.

Realismo aplastante

Lo que más sorprende de la nueva versión es la enorme dosis de realismo que ofrece. El juego permite vivir a los usuarios las sensaciones más cercanas a una experiencia de pilotaje de un avión, tomando los mandos de más de una veintena de aparatos aéreos, desde el pequeño Mudry Cap 10 al Boeing 787, pasando por el Airbus 320-Neo o el Pitts S2S.

El realismo del videojuego es tal que intenta imitar a la realidad en todos sus aspectos, por lo que –como en la vida real– antes de emprender un vuelo comercial transoceánico, el usuario debe pasar por la escuela y hacer algunos tutoriales.

Los responsables del juego han ido más allá en esto del realismo, por lo que han recreado al milímetro la mayoría de los aeropuertos del mundo. El simulador plasma la realidad mediante fotogrametría y modelados 3D, por lo que el nivel de fidelidad gráfica es tal que, al volar a baja altura, es posible reconocer edificios como tu propia casa, el lugar donde trabajas o monumentos emblemáticos.

Este nuevo Flight Simulator incluye la reacción a los mandos, el ruido de los motores o la vista desde la cabina, detalles a los que los amantes del juego son particularmente sensibles y que mejoran considerablemente la experiencia de juego.

El juego permite, además, recrear cualquier vuelo realizable en la vida real. De esta forma, es posible desplazarse hasta el aeropuerto de Madrid, por ejemplo, consultar las salidas y llegadas previstas en tiempo real y realizar exactamente el mismo trayecto copiando el plan de vuelo, la ruta y el modelo del avión. Como la vida misma.

Tecnología puntera y exigente

Para lograr la profundidad, la variedad y la calidad de los paisajes, el equipo de diseño y desarrollo los ha construido con imágenes de satélite generadas en tiempo real, con lo que logran reproducir literalmente el mundo entero, además de adaptarse a los cambios de la meteorología y a su incidencia en el vuelo de los aviones.

Este impresionantes realismo se ha conseguido gracias a herramientas punteras, sirviéndose de tecnologías como la inteligencia artificial o la potencia de los propios servidores de Microsoft.

Una de las novedades más esperadas por los jugadores se ha hecho realidad: este nueva versión aprovecha el poder de la nube para recrear el mundo. Su motor gráfico de basa en la información de los mapas de Bing, propiedad de Microsoft.

Eso sí, para poder jugarlo hay que disponer de una máquina de muy alto nivel, que sea capaz de soportar la demanda del software en términos de capacidad de cálculo y de conexión a internet. Por lo que su experiencia de juego no está al alcance de cualquiera

La primera impresión de esta nueva versión ha sido muy buena. Sometida al examen de la prensa especializada antes de salir al mercado, la nueva versión de este legendario videojuego ha cosechado un éxito rotundo. Ahora que viajar está más complicado que nunca, tal vez el Flight Simulator de Microsoft sirva de alivio a los aventureros de la aviación.