Atenas confisca el dinero de todas las entidades públicas. El gobierno de Tsipras ordena transferir esos fondos al Banco Central de Grecia para pagar compromisos urgentes por 3.000 millones de euros en salarios, pensiones e intereses de la deuda.
Atenas confisca el dinero de todas las entidades públicas. El gobierno de Tsipras ordena transferir esos fondos al Banco Central de Grecia para pagar compromisos urgentes por 3.000 millones de euros en salarios, pensiones e intereses de la deuda.