Un policía muere en Lima cuando intentaba desactivar una granada colocada tan solo a tres metros de la puerta de un colegio. El artefacto fue colocado por extorsionadores que pedían dinero. Minutos antes otra granada explotó debajo de una camioneta.

Un policía muere en Lima cuando intentaba desactivar una granada colocada tan solo a tres metros de la puerta de un colegio. El artefacto fue colocado por extorsionadores que pedían dinero. Minutos antes otra granada explotó debajo de una camioneta.