David Oubel hizo una vida normal en las horas previas a los crímenes y planeó meticulosamente su actuación. El novio del parricida afirma que le avisó de que el viernes, día que asesinó a sus dos hijas, no iría a trabajar “porque se encontraba mal”.

David Oubel hizo una vida normal en las horas previas a los crímenes y planeó meticulosamente su actuación. El novio del parricida afirma que le avisó de que el viernes, día que asesinó a sus dos hijas, no iría a trabajar “porque se encontraba mal”.