Cadetes australianos sufrieron abusos sexuales en varias academias militares
La comisión, de carácter oficial y que indaga la respuesta de instituciones religiosas, públicas y educativas a la pederastia en las últimas décadas en el país, ya inició el examen a las Fuerzas Australianas de Defensa donde se han prestado a declarar 111 testigos. La pesquisa se centra por ahora en las violaciones cometidas en la academia naval de Leeuwin, en el estado de Australia Occidental, entre 1960 y 1980; y en la escuela de aprendices del Ejército en Balcombe, en Victoria, entre 1970 y 1980. El experto Angus Stewart dijo que los dos centros fueron elegidos por ser donde se concentra el mayor número de testigos pero subrayó que las violaciones fueron una práctica sistemática y extendida en las instalaciones de formación militar del país. Stewart también aclaró que la mayoría de estos actos fueron perpetrados como parte de «practicas rituales de degeneración diseñadas para amoldar y humillar a los nuevos reclutas en la marina».
Reuters
De acuerdo con las denuncias por parte de varias víctimas en una comisión de investigación, adolescentes reclutados en las Fuerzas Armadas de Australia sufrieron durante décadas abusos sexuales como parte de los rituales de iniciación a la milicia.
La comisión, de carácter oficial y que indaga la respuesta de instituciones religiosas, públicas y educativas a la pederastia en las últimas décadas en el país, ya inició el examen a las Fuerzas Australianas de Defensa donde se han prestado a declarar 111 testigos. La pesquisa se centra por ahora en las violaciones cometidas en la academia naval de Leeuwin, en el estado de Australia Occidental, entre 1960 y 1980; y en la escuela de aprendices del Ejército en Balcombe, en Victoria, entre 1970 y 1980. El experto Angus Stewart dijo que los dos centros fueron elegidos por ser donde se concentra el mayor número de testigos pero subrayó que las violaciones fueron una práctica sistemática y extendida en las instalaciones de formación militar del país. Stewart también aclaró que la mayoría de estos actos fueron perpetrados como parte de «practicas rituales de degeneración diseñadas para amoldar y humillar a los nuevos reclutas en la marina».
