Corea del Norte realiza el primer lanzamiento con éxito de un misil nuclear
El primer lanzamiento sucedió durante la mañana, pero fracasó. Dos horas más tarde, sin embargo, un segundo misil disparado desde una base en la costa este del país voló cientos de kilómetros sobre el Mar del Japón, siendo esta la primera vez que se conoce un lanzamiento exitoso de la nueva arma capaz de llevar una ojiva nuclear. El BM25 Musudan tiene un alcance estimado de entre 2500 y 4000 kilómetros, por lo que estaría en condiciones de atacar Corea del Sur, Japón y la isla de Guam, un territorio de Estados Unidos, en el pacífico. Asimismo, Pyongyang tendrá también capacidad de lanzar ataques nucleares en gran parte del continente asiático. El misil fue presentado oficialmente en 2010, pero los lanzamientos, hasta ahora todos fallidos, comenzaron en abril de 2016. Desde Estados Unidos y Japón han manifestado su preocupación y señalan que las pruebas «no pueden ser toleradas».
Tras cuatro pruebas fallidas durante los últimos meses, Pyonyang lanza con éxito un misil tipo Musudan con capacidad de alcanzar la base estadounidense en la isla de Guam. La prueba tuvo lugar el martes cuando, al parecer, lanzaron dos misiles de mediano alcance, uno de los cuales fracasó pero el otro logró cubrir una distancia de 400 kilómetros.
El primer lanzamiento sucedió durante la mañana, pero fracasó. Dos horas más tarde, sin embargo, un segundo misil disparado desde una base en la costa este del país voló cientos de kilómetros sobre el Mar del Japón, siendo esta la primera vez que se conoce un lanzamiento exitoso de la nueva arma capaz de llevar una ojiva nuclear. El BM25 Musudan tiene un alcance estimado de entre 2500 y 4000 kilómetros, por lo que estaría en condiciones de atacar Corea del Sur, Japón y la isla de Guam, un territorio de Estados Unidos, en el pacífico. Asimismo, Pyongyang tendrá también capacidad de lanzar ataques nucleares en gran parte del continente asiático. El misil fue presentado oficialmente en 2010, pero los lanzamientos, hasta ahora todos fallidos, comenzaron en abril de 2016. Desde Estados Unidos y Japón han manifestado su preocupación y señalan que las pruebas «no pueden ser toleradas».