El ingente número de presos en las cárceles de Tailandia obliga al Gobierno a repensar su cruzada contra las drogas
El Ministro de Justicia tailandés, Paiboon Koomchaya, ha declarado que se plantea realizar cambios sobre la estricta legislación vigente, pero que será un proceso a largo plazo. «Me gustaría desclasificar las metanfetaminas, pero Tailandia aún no está preparada», ha comentado el Ministro en una entrevista con la agencia Reuters. Este cambio supondría volver a evaluar las penas de cárcel por posesión, el principal motivo de la masificación de presos en las cárceles. Por ejemplo, en la cárcel de Klong Prem, en Bangkok, de los 6.267 presos que cumplen condena, el 64% lo hacen por delitos relacionados con las drogas. Los calabozos miden tan sólo 1,5 x 3 metros y en ellos conviven normalmente cinco presos. En todo el país, la cifra total de prisioneros asciende a 321.347, y los datos señalas que el 70% fueron encarcelados por este tipo de delitos relacionados con la posesión o tráfico de narcóticos. A pesar del aumento gradual de presos en las cárceles tailandesas, las estadísticas sobre consumo de droga también van en aumento, lo que está provocando que el gobierno empiece a replantearse la efectividad real de su jurisprudencia. Al contrario que en Filipinas, donde el recién nombrado presidente Rodrigo Duterte ejecutó a 30 narcotraficantes en sus cuatro primeros días de mandato, los tailandeses plantean suavizar las leyes, aunque tal y como indican desde el Ministerio de Justicia, será un cambio que llevar a cabo de forma gradual.
Las cárceles de Tailandia están a rebosar, y en gran medida se debe a las durísimas leyes impuestas por el gobierno del país para controlar el consumo y tráfico de drogas. Ante el elevado número de presos, el país parece reconocer su derrota en la lucha antidroga, con un ejecutivo que se plantea cambios al no poder hacer frente a las consecuencias de las medidas impuestas.
El Ministro de Justicia tailandés, Paiboon Koomchaya, ha declarado que se plantea realizar cambios sobre la estricta legislación vigente, pero que será un proceso a largo plazo. «Me gustaría desclasificar las metanfetaminas, pero Tailandia aún no está preparada», ha comentado el Ministro en una entrevista con la agencia Reuters. Este cambio supondría volver a evaluar las penas de cárcel por posesión, el principal motivo de la masificación de presos en las cárceles. Por ejemplo, en la cárcel de Klong Prem, en Bangkok, de los 6.267 presos que cumplen condena, el 64% lo hacen por delitos relacionados con las drogas. Los calabozos miden tan sólo 1,5 x 3 metros y en ellos conviven normalmente cinco presos. En todo el país, la cifra total de prisioneros asciende a 321.347, y los datos señalas que el 70% fueron encarcelados por este tipo de delitos relacionados con la posesión o tráfico de narcóticos. A pesar del aumento gradual de presos en las cárceles tailandesas, las estadísticas sobre consumo de droga también van en aumento, lo que está provocando que el gobierno empiece a replantearse la efectividad real de su jurisprudencia. Al contrario que en Filipinas, donde el recién nombrado presidente Rodrigo Duterte ejecutó a 30 narcotraficantes en sus cuatro primeros días de mandato, los tailandeses plantean suavizar las leyes, aunque tal y como indican desde el Ministerio de Justicia, será un cambio que llevar a cabo de forma gradual.