Reveladas dos páginas del diario de Ana Frank que muestran su curiosidad por el sexo
Unos investigadores han revelado dos páginas desconocidas con algunos comentarios sobre sexualidad que Ana Frank trató de ocultar.
Durante 70 años han estado ocultas detrás del papel marrón de embalar del diario de la joven judía Ana Frank, fechado el 28 de septiembre de 1942. Ahora, unos investigadores han revelado dos páginas desconocidas con chistes y algún comentario sobre sexualidad que Ana Frank trató de tapar al contener lo que ella llamaba «asuntos sexuales».
Estas páginas han sido descubiertas al utilizar nuevas tecnologías digitales, ha informado la Casa de Ana Frank y otras dos instituciones culturales holandesas.
«A veces me imagino que alguien podría venir a verme y pedirme que le informe sobre asuntos sexuales», escribió Frank en holandés. «¿Cómo lo haría?» Intenta responder, dirigiéndose a un oyente imaginario con un tono elevado, utilizando frases como «movimientos rítmicos» para describir el sexo.
También escribe sobre la menstruación, de la que dice es «una señal de que está madura», y la prostitución: «En París tienen grandes casas para eso».
Sin embargo, para el director de la Fundación Ana Frank, Ronald Leopold, los textos «no nos dicen nada nuevo». «Es una joven de 13 años en plena pubertad», indica, destacando cómo su estilo delata a una incipiente escritora, que era en lo que quería convertirse la joven, como relata más adelante en su diario.
Frank quería escribir una novela y usar su diario como base. Se presume que ella misma pegó las páginas 78 y 79 porque se avergonzaba de su contenido. «Probablemente tuvo miedo de que alguien lo pudiera leer», estima Leopold.
Estas dos páginas nuevas fueron escritas en el primer diario de la joven el 28 de septiembre de 1942, cuanto tenía 13 años. Durante su tiempo en la clandestinidad, escribió dos versiones del mismo. El primero, escrito en varios pequeños cuadernos desde su 13 cumpleaños, el 12 de junio de 1942, hasta el 1 de agosto de 1944, era estrictamente para ella; el segundo, escrito tras escuchar en la radio que el Gobierno holandés en el exilio planeaba publicar relatos de testigos del sufrimiento bajo la ocupación alemana, estaba formada por 215 páginas.
Ana Frank murió a los 15 años, en 1945, en el campo de concentración de Bergen-Belsen, después de haber sido detenida un año antes junto a su familia. Su padre Otto Frank fue el único que sobrevivió. Después de la guerra recibió el diario de su hija y lo publicó en 1947.