Isabella Rodríguez, de una favela a Miss Venezuela 2018
Isabella Rodríguez, una joven de 25 años nacida en la empobrecida barriada caraqueña de Petare, ha sido coronada este jueves como Miss Venezuela 2018 en una ceremonia que no logró emocionar a la audiencia. Pese a haber nacido en Petare, la favela más grande de Venezuela y una de las más extensas de América Latina, Rodríguez representó a Portuguesa, un estado agricultor de los Llanos. La ganadora representará a Venezuela en la edición del Miss Mundo en 2019.
Isabella Rodríguez, una joven de 25 años nacida en la empobrecida barriada caraqueña de Petare, ha sido coronada este jueves como Miss Venezuela 2018 en una ceremonia discreta. Pese a haber nacido en Petare, la favela más grande de Venezuela y una de las más extensas de América Latina, Rodríguez representó a Portuguesa, un estado agricultor de los Llanos. La ganadora representará a Venezuela en la edición del Miss Mundo en 2019.
«De Petare para el mundo, los sueños sí se pueden hacer realidad», ha respondido la modelo profesional en la ronda de preguntas. El último censo existente sobre la favela, de 2011, estimó que viven unas 500.000 personas en la barriada, aunque la cifra actualmente es muy superior.
Por otra parte, esta la primera edición de Miss Venezuela en 40 años que no ha sido dirigido por Osmel Sousa, quien renunció al cargo en febrero, semanas antes de destaparse un escándalo de supuesto proxenetismo y favores sexuales que vinculó a exmisses con millonarios cercanos al gobierno.
En cuanto a la gala, que duró cuatro horas, numerosos expertos sostienen que tuvo poco nivel y un ritmo anodino, además de dejar detalles de mal gusto. La información de las candidatas aportada por los presentadores durante la gala se redujo a su edad y estatura.
En cualquier caso, La opulencia es cosa del pasado en este concurso del que han salido siete Miss Universo y seis Miss Mundo. De hacerse en el poliedro de Caracas, con un aforo de 20.000 personas, ha pasado a un estudio de la cadena propietaria de los derechos, Venevisión, con capacidad para unas 200.
El espectáculo ha tenido que ser adaptado por la profunda crisis económica, que conlleva una escasez de bienes básicos y una inflación proyectada por el FMI en el 10.000.000% para 2019. Un cóctel que ha empujado a 2,3 millones de venezolanos a irse del país desde 2015.