Barcelona ve proporcional el disparo de un policía que mató a una perra
El comisionado de seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Amadeu Recasens, ha defendido este miércoles que, según la información recabada por la investigación de la unidad de asuntos internos, la actuación del agente de la Guardia Urbana que mató a un perro de un tiro fue defensiva y proporcional, informa Efe. Recasens, que ha señalado que siempre que hay un disparo en la ciudad se investiga el caso, ha subrayado que las diligencias hechas en esta ocasión han sido «de las más completas» y ha detallado que se han analizado las comunicaciones de la sala conjunta y se pidieron imágenes de las cámaras de seguridad de los establecimientos de la zona aunque, «lamentablemente», por distintos motivos, ninguna registró los hechos.
El comisionado de seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Amadeu Recasens, ha defendido este miércoles que, según la información recabada por la investigación de la unidad de asuntos internos, la actuación del agente de la Guardia Urbana que mató a un perro de un tiro fue defensiva y proporcional, informa Efe. Recasens, que ha señalado que siempre que hay un disparo en la ciudad se investiga el caso, ha subrayado que las diligencias hechas en esta ocasión han sido «de las más completas» y ha detallado que se han analizado las comunicaciones de la sala conjunta y se pidieron imágenes de las cámaras de seguridad de los establecimientos de la zona aunque, «lamentablemente», por distintos motivos, ninguna registró los hechos.
En su comparecencia en la comisión de presidencia y seguridad, el comisionado ha aclarado que alguna de las informaciones que se hicieron públicas los días posteriores no eran ciertas y ha señalado que no hubo ninguna llamada previa de ningún hotel u otra persona. El comisionado ha puntualizado que el caso se encuentra en disposición judicial y ha señalado que, «si en el juicio aparecen nuevas pruebas», se actuará en consecuencia. Recasens ha recordado que el ayuntamiento pidió públicamente testigos y pruebas, pero ha señalado que aún «no ha habido ningún testimonio que dé una visión diferente» de la recogida en las diligencias.
La muerte de la perra, llamada Sota, ocurrió el pasado diciembre, cuando un agente de la Guardia Urbana de Barcelona se dirigió al dueño del animal, un hombre que vende pulseras en la calle, para decirle que el can debía ir atado. Al notar tensión el perro comenzó a ladrar y, posteriormente, el agente le disparó después de que el can intentara agredirle, según su versión. Inmediatamente después, el dueño de Sota atacó al policía con su monopatín. Ante la indignación generada por el suceso, se convocaron distintas concentraciones y el Ayuntamiento anunció que revisaría el protocolo de actuación en casos de animales agresivos.
Cataluña volvió a vivir una polémica similar a la de Sota el pasado viernes, cuando un agente de la policía local de Calafell (Tarragona) mató de un disparo a un perro, de raza rottweiler, cuando le iba a atacar. El Ayuntamiento ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias del suceso. La muerte del perro indignó, de nuevo, a los colectivos animalistas.
🔴 GRÀCIES a totes les persones que avui heu participat a la concentració per demanar #JusticiaParaShaitan. 🐕
Cada dia som més els que donem veu als animals i lluitem contra la violència sistemàtica que pateixen. No ens rendirem. Seguirem lluitant. Per ells, perquè és just. pic.twitter.com/jt1CoUpyXE
— PACMA Catalunya (@pacmacatalunya) 12 de enero de 2019