¿Son las relaciones abiertas en el matrimonio la clave para la felicidad?
El 77% de los matrimonios que tiene una relación abierta no lo cuenta ni a amigos ni a familiares
El mundo de las relaciones de pareja en el siglo XXI está en permanente proceso de cambios, con el poliamor como una de las tendencias de los últimos años. Cuando se habla de matrimonio, como la unión de dos personas, los cambios no son perceptibles, pero parece que cada vez más se llevan las relaciones abiertas.
¿Qué opinarían las parejas si tuvieran la certeza de que serían más felices y el matrimonio más duradero si dependiera de tener relaciones con otras personas? Esa es la pregunta que ha hecho Ashley Madison, portal líder de citas para personas casadas, a más de 2.700 de usuarios. Los datos revelan que el 42% de las mujeres, frente al 38% de los hombres, se plantearía una relación abierta con su pareja.
Otra de las conclusiones de la encuesta pone de manifiesto que 1 de cada 5 personas que usan el portal de citas ya vive una relación abierta. Una forma de actuar más próxima al poliamor, ya que no se consideran infieles porque sus parejas son conscientes de la situación y también buscan sus propias relaciones al margen de la principal.
En general, la discreción sigue siendo fundamental para estas personas. De hecho, el 77% de los encuestados reconoce que ni su familia ni amigos saben que están en una relación abierta. Esto es así porque la mitad de los usuarios cree que su entorno no lo entendería, mientras que el 46% dice que simplemente así es más fácil.
A la pregunta de ¿qué es lo mejor de estar en una relación abierta?, el 48% contesta que «funciona en mi relación»; el 45% dice que «experimentamos con distintas personas»; el 25% responde que «nos expresamos de una forma que funciona mejor para nosotros»; y otro 23% asegura que «nos gusta hablar entre nosotros de nuestras experiencias con otras personas».
En cuanto a cuáles son los mayores retos en una relación abierta, el 45% dice que «encontrar a otras personas con las que mantener relaciones»; el 40% opta por «mantenerlo en secreto con amigos y familiares»; y el 33% responde que «no sentir celos».
“Más de la mitad de los usuarios a los que hemos encuestado y que están en una relación abierta nos han contado que fue algo que surgió de mutuo acuerdo”, dice Víctor Hermosillo, responsable de Ashley Madison en el mercado hispano. «Y a pesar de que buena parte de estas parejas reconoce que su relación funciona mejor así, son todavía reacios a compartirlo con sus seres queridos, fundamentalmente por miedo a ser juzgados, por lo que siguen apostando por la discreción».
Recientes estudios han revelado que, en contra de lo que la gente piensa, una relación abierta puede llevar a menores cantidades de celos, indica el portal. También lleva a incrementar la confianza en la pareja y a conseguir mayores niveles de satisfacción que en una relación monógama. Todo ello debido a que una relación abierta puede eliminar las barreras de la confianza y acabar con la estricta línea de la fidelidad sexual.
«Hoy en día la monogamia no es necesariamente sinónimo de matrimonio», comenta la doctora Tammy Nelson, autora de La Nueva Monogamia. “Lo que se puede aceptar en una relación o con quién duerme cada uno es algo que se negocia entre las parejas. Y cada vez más surgen nuevas formas, que incluye otras parejas sexuales, amigos con ciertos derechos, y una amplitud de fronteras alrededor de la fidelidad sexual. Estamos viendo una nueva ola de transparencia y negociación en los matrimonios de hoy. Lo que no necesariamente significa menos compromiso con la relación. Lo que hace que estos matrimonios funcionen es el acuerdo al que han llegado, la honestidad. La verdad es universal».
A pesar de todo, el tema de las relaciones abiertas sigue siendo tabú en la sociedad y el miedo a plantearlo en una relación persiste. De hecho, el 73% de los encuestados dice no haber hablado nunca con su pareja acerca de abrir la relación, principalmente por miedo al rechazo, ya que el 91% no cree que su pareja lo aceptara.