Garbiñe Muguruza, más allá del tenis: el hombre que (por fin) hay en su vida
La tenista por fin parece haber encontrado el amor, algo que hace unos años le parecía «imposible» por su arduo trabajo
La tenista Garbiñe Muguruza ha logrado este jueves entrar en la historia del deporte español. Tras su victoria ante la estonia Anett Kontaveit en dos sets, Muguruza se ha convertido en la primera tenista española que logra hacerse con la corona del Masters de la WTA, ascendiendo en el ranking mundial hasta agarrarse a la tercera plaza.
Este es el décimo título en la trayectoria de la española, de 28 años. Antes se coronó en Hobart-2014, Pekín-2015, Roland Garros-2016, Wimbledon-2017, Cincinnati-2017, Monterrey-2018, Monterrey-2019, Dubai-2021 y Chicago-2021. Un sinfín de logros que despiertan aún más el interés por la persona que hay tras la deportista de élite.
Más allá del tenis, Garbiñe es sumamente reservada con su vida privada. A pesar de su recelo, hoy se conocen algunos datos de su intimidad, mal que le pese a la nacida en Caracas, Venezuela. Te los contamos a continuación.
La familia de Garbiñe Muguruza
La tenista es hispano-venezolana porque su padre, José Antonio Muguruza, es vasco (Azcoitia, Guipúzcoa), y su madre, Scarlet Blanco, es venezolana. Garbiñe siempre se ha mostrado orgullosa de ellos y de lo que han invertido en su formación en el deporte: «Mi padre trabaja con el metal en Venezuela y mi madre cuidándonos. Admiro de ellos el esfuerzo que han hecho por sus hijos. El tenis es un deporte caro».
Garbiñe nació en Caracas porque su padre emigró en 1978 a Venezuela, donde conoció a su mujer. Cuando la deportista era pequeña, se mudaron a Guatire (Miranda), donde tanto ella como sus dos hermanos, Asier e Igor (11 y 10 años mayores que ella), comenzaron a jugar al tenis desde muy pequeños. Una afición propiciada por los padres de los tres críos, pues querían que se dedicasen profesionalmente a ello, aunque al final sólo lo hizo la hija, quien pronto empezó a destacar. De hecho, con sólo seis años, Garbiñe se trasladó a Barcelona para formarse como tenista profesional en la Bruguera Tennis Academy, del tenista Sergi Bruguera.
El hombre que hay en su vida
Desde que saltó a la fama, nunca se le había conocido pareja. Ella misma se ha referido a esto en alguna ocasión, alegando que no tenía «tiempo» para pensar en amores: «Tener vida social y estar dentro del mundo del deporte al máximo nivel es complicado. Siempre estoy de gira, sólo tengo dos semanas de vacaciones… Lo del novio lo doy por imposible».
Sin embargo, el amor parece haber llegado al fin a su vida. En los últimos meses, se ha relacionado a Garbiñe con Arthur Borges, un joven alicantino relacionado con la industria de la moda de lujo y con firmas como Tom Ford y Giorgio Armani. Ninguno de los dos ha confirmado esta relación, pero se ha visto al chico en la competición celebrada en Guadalajara, apoyando a ¿su chica?
Moda y dinero
Lo cierto es que la amistad especial de Garbiñe con Arthur no es sorpresiva, ya que la tenista es una aficionada al mundo de la moda desde siempre. Además, ha hecho campañas con firmas como Stella McCartney, Rolex y Adidas, entre muchas otras. Sus numerosos títulos en el campo de juego y su imagen fuera, le han reportado muchos beneficios económicos. En concreto, según Forbes, en 2020 tuvo unas ganancias de 6,6 millones de dólares; en 2019 ganó 5,9 millones de dólares; y en 2018 diez millones.
Desde luego, no le va nada mal. De hecho, desde hace casi cinco años, vive en uno de los lugares más exclusivos de Europa: en Ginebra, donde tiene una casa frente al Lago Leman. Viaja por todo el mundo pero siempre regresa a su hogar, que ha sido su templo de paz durante todo el confinamiento.