Los 50 años de Penélope Cruz: dos hijos, enamorada de Bardem y con cuatro casas
La actriz ha cambiado de década en su mejor momento, tanto profesional como personal junto a su familia
El pasado 28 de abril, Penélope Cruz cumplió 50 años. Lo ha hecho en uno de los momentos más importantes de su vida, en el que ha encontrado, no solamente la solidez profesional, sino, también, personal. La actriz española con más repercusión mundial disfruta de su amor con Javier Bardem, la educación de sus dos hijos Leo y Luna, y de la holgada fortuna que ha amasado con su imparable carrera. Esto ha hecho que el matrimonio se convierta en uno de los más influyentes con cuatro impresionantes casas y con un gran patrimonio. A pesar de todo, ni Penélope ni Javier han renegado nunca de sus inicios, de su vida en un barrio obrero, de sus orígenes humildes.
Además, tampoco se han olvidado de sus compromisos sociales y políticos, que siempre han llevado por bandera. Es por eso que, en este cumpleaños, Penélope no solamente tiene que celebrar un cambio década, sino que, además, su éxito personal. Penélope se casó con Javier Bardem hace casi quince años después de que se conocieran en el film Jamón, jamón. Su historia de amor se selló con una espectacular boda en la isla privada de Johnny Depp y con el nacimiento de sus dos hijos. Ahora, tanto Penélope como Javier disfrutan de una gran estabilidad laboral, de su amor y de la familia que han formado.
Su historia de amor con Javier Bardem
Penélope nació a mediados de los 70 en la localidad de Alcobendas, en Madrid. Su primera película El laberinto griego y, después, vino Jamón, jamón de Vigas Luna. Aunque ahí ya coincidió con Bardem probablemente ese no era el momento ni la ocasión para que comenzara su historia de amor. En todo este tiempo, la actriz ha recibido un Oscar como Actriz de reparto y, además, ha estado nominada hasta en cuatro ocasiones. Además, en estos años ha trabajado de la mano de Almodóvar, lo que ha hecho que se convirtiera en una de sus musas.
Fue Bardem quien confesó que siempre se había sentido atraído por Penélope Cruz. Antes de eso, la actriz salió con Tom Cruise, Nacho Cano o Matthew McConaughey. En el año 2010, Cruz y Bardem celebraron una discretísima boda en la que solamente acudieron sus más allegados. Antes de eso, habían vivido su historia de amor, durante tres años, alejada de los focos. Tras unos años casados vino al mundo su primer hijo, un niño al que llamaron Leo. Fue en ese momento cuando tuvieron que tomar una decisión crucial en su vida; cómo podían conciliar su vida profesional con su reciente maternidad y paternidad. Y esto pasaba por dónde establecían su residencia.
Sus cuatro casas
Cabe destacar que las oportunidades como actores, para ambos, no solamente se desarrollan en nuestro país, sino que, también, lo hace en Hollywood. Dos años después del nacimiento de Leo vino al mundo Luna, para completar su familia. A partir de ese momento, tuvieron claro que la prioridad eran sus hijos y, por eso, decidieron dividir su vida entre Estados Unidos y España. Siempre han intentado cerrar filas sobre su vida privada y es por eso que han sido poquísimas las ocasiones en las que se ha pronunciado sobre su parcela más íntima. Probablemente porque su deseo es que sus hijos se mantengan al margen de toda la presión mediática.
Su vida se desarrolla entre las dos viviendas que tienen en Madrid. La primera de ellas, la más grande, se encuentra a las afueras de la capital, en la urbanización Valdelagua, donde también reside, por ejemplo, Rocío Carrasco. Es allí donde ambos tienen un impresionante chalet que, además, cuenta con varias plantas, seguridad privada y un gran jardín con piscina. La segunda residencia está ubicada en el centro de Madrid y es fundamental para todas aquellas ocasiones en las que tiene compromisos en la capital. El piso se emplaza enfrente de El Retiro y es un edificio de principios del siglo XX. Además, tiene 350 metros cuadrados y está valorado en más de 2,5 millones de euros.
A pesar de todo, su segundo hogar siempre ha estado en Los Ángeles, tal y como desvelan desde la revista Clara. La vivienda tiene solamente una planta y está ubicada en una de las mejores zonas de la ciudad. Esta fue construida en 1956 y tiene tres dormitorios, cuatro baños, un jardín tropical y una piscina climatizada. En el año 2011 fue puesta a la venta por 3,1 millones de euros y, todavía, no han sido capaces de culminar la transacción. Debido a su amor por las Bahamas, donde se casaron, el matrimonio decidió hacerse con una casa con siete dormitorios, nueve cuartos de baño, tres cocinas, un jacuzzi, terraza, jardín y acceso a una playa privada.