Las estrictas normas del internado de la infanta Sofía: nada de fotos y habitaciones compartidas
La hija pequeña de Felipe y Letizia llegó al UWC College de Gales el pasado mes de agosto donde estará dos años
Las estrictas normas del internado de Gales. | Casa Real
Cuando los Reyes decidieron mandar a sus dos hijas a estudiar a Gales sabían todas las consecuencias. Pero, sobre todo, eran conscientes de los beneficios que le iba a proporcionar tanto a Leonor como a Sofía, un ambiente internacional, lejos del foco público y, sobre todo, con una gran exigencia. El deseo de Felipe y Letizia siempre ha sido que ambas se criaran de la forma más normal posible, alejadas de todas las responsabilidades de la Casa Real. Aunque eso sí, para mantener ese nivel de vida, las dos han tenido que renunciar a varias cosas, momentos muy normales en personas de su edad, como es compartir imágenes en las redes sociales o participar en multitudinarias fiestas. Algo que especialmente está prohibido por parte del internado de Gales. Pero ¿qué más no se permite dentro de la institución?
Si por algo está caracterizado el UWC Atlantic College de Gales es porque está repleto de rostros conocidos de las distintas casas reales. Por sus aulas, no solamente ha pasado la princesa Leonor, sino que, también, por ejemplo, lo ha hecho Amalia de Holanda. El internado se ha convertido en un lugar en el que se entremezclan personas pertenecientes a la realeza y alumnos, totalmente anónimos, que acuden becados. Una combinación que hace del sitio un lugar ideal para que aquellos más privilegiados puedan poner los pies sobre la tierra. Aunque eso sí, aunque intenten comparar sus clases con cualquier otras del mundo, sí que es cierto que tienen que seguir unas normas relacionadas con la convivencia y, sobre todo, con la privacidad.
La controvertida foto de Sofía
Fue hace unos días cuando saltaron las alarmas. Una amiga de la Infanta, coincidiendo con el cumpleaños de Sofía, compartió una imagen de ambas frente a un espejo en la que felicitaba a la hija de Letizia y Felipe por su 17º cumpleaños. Un extremo que está totalmente prohibido. Y no solamente porque a la Casa Real no le hace especial ilusión que se compartan instantáneas de la vida privada de sus hijos, sino porque, también, aquellas que se toman dentro del campus no deben subirse a las redes sociales. Aún así, esto no ha impedido que, en los últimos meses, se hagan públicas algunas instantáneas de las fiestas que se celebran en el internado y hasta de lo que comen en el Buffet.
También, hace unos meses, una de las compañeros de Sofía subió un vídeo a sus redes sociales donde hacía un pequeño room tour por su habitación, en la que desvelaba todos los secretos de la estancia y cómo estaba distribuida. Así, pudimos ver que las habitaciones son especialmente grandes, con un gran espacio de almacenamiento y, también, un escritorio, donde los alumnos dedican sus horas de estudio. Además, otro aspecto que llamó la atención es que las estancias son compartidas, por los que todos ellos duermen siempre acompañados de otra persona que, también, estudia en el centro. También, son llamativas las espectaculares vistas que tienen todos los alumnos desde su habitación desde donde se puede comprobar que el colegio está ubicado en medio de la naturaleza.
Las duras normas de la Infanta
Otro de los extremos que, en algún momento, ha podido preocupar a la reina Letizia tiene que ver con la alimentación. La monarca está totalmente tranquila porque sabe que su hija Sofía goza de un menú variado y equilibrado en el que se incluye carne, pescado, fruta y verdura. Además, cada domingo, como día especial, tiene un brunch, en el que fusionan tanto el desayuno como la comida. También, tienen distintas opciones como dulces y saladas. De la misma forma, gozan del privilegio de tener alumnos de distintas culturas, lo que hace que los platos que se ofrecen sean muy variados.
Esta mezcla de culturas provoca que, también, se realicen infinidad de fiestas de distintas temáticas, adaptadas al origen de cada uno de los compañeros de la infanta Sofía. Por ejemplo, como sigue la tradición, cada viernes organizan una fiesta temática de disfraces. Sí que es cierto que, desde el pueblo donde se emplaza el internado, se han producido varias críticas, sobre todo por parte de los ciudadanos que allí residen. Esto se debe al ruido que hacen los estudiantes cuando trasladan sus fiestas hasta los bares del pueblo.
A pesar de todo, eso no es especialmente común, teniendo en cuenta que la mayoría de actividades se realizan a puerta cerrada para conservar la privacidad de aquellos alumnos más distinguidos. Esto, básicamente, se produce para cuidar su integridad física y, también, para que no se compartan imágenes suyas. Desde el programa Fiesta, este mismo fin de semana, han mencionado el problema que ha causado la publicación de la foto de la Infanta, lo que ha hecho que los Reyes se preocupen especialmente. En la instantánea se puede ver a la Infanta, de espaldas, pero visiblemente reconocida, junto a una amiga que titula la foto como ‘Sofía Day‘.
