El gran cambio físico de Raquel Sánchez-Silva: looks arriesgados y músculos de gimnasio
La presentadora acude a ‘El Hormiguero’ para hablar de la nueva temporada de ‘Tu cara me suena’ donde triunfa
El cambio físico de Raquel Sánchez-Silva | Gtres
Raquel Sánchez-Silva comenzó en el mundo de la televisión gracias al Telediario de TVE. Cuando terminó la carrera, la presentadora se hizo con las riendas del noticiero y, más adelante, pasó a hacerse cargo de otros formatos como Supernanny, Supervivientes o Expedición Imposible. Su último proyecto ha sido Maestros de la costura, en la que la de Plasencia tiene en su haber ya seis ediciones. Ahora, Sánchez-Silva se ha aventurado a participar en Tu cara me suena, un nuevo reto, dentro de la televisión, en el que hemos podido conocer su faceta más desconocida como actriz y cantante. También, en todos estos años hemos sido conscientes de su impresionante evolución física, en la que hemos visto como sofisticaba su estilo y musculaba su cuerpo.
Desde que se hizo conocida, Raquel se ha convertido en todo un referente en el mundo de la comunicación. Es por eso que, durante su vida profesional, ha pasado por infinidad de formatos por distintas cadenas. En todos ellos, el balance ha sido positivo. Ahora, la presentadora acude a El Hormiguero, junto a su compañero Juanra Bonet, para, según mencionan desde la página web de Atresmedia, «hablar de la nueva temporada de Tu cara me suena, que se emite con gran éxito todos los viernes en el prime time de Antena 3».
Los comienzos de Raquel Sánchez-Silva
Raquel Sánchez-Silva se licenció en Periodismo en la Universidad Pontificia de Salamanca. Luego, comenzó sus prácticas en la sección de Deportes de los Informativos de TVE. Más tarde, pasó por TelePlasencia, Telemadrid y Canal+. Probablemente, su actuación más importante fue durante Pekín Express, el formato de aventuras que presentó durante un año después de sustituir a Paula Vázquez. También, su trabajo más especial fue, junto a Jorge Javier Vázquez, en Supervivientes, donde presentó el programa desde Honduras. Fue en esa etapa cuando conoció a quien sería su marido, Mario Biondo, y con quien llegó a casarse. Ya en ese momento, Raquel daba buena cuenta de su pasión por la Moda, sobre todo teniendo en cuenta los looks de infarto, totalmente mimetizados con el ambiente, que lucía gala tras gala.
Su cambio de estilismo
A su vuelta de Honduras, y pasado un tiempo, Raquel y Mario se prometieron amor eterno. Juntos se dieron el ‘sí, quiero’ en la localidad de Taormina, en Sicilia, de donde era Biondo. Ese día lo describió la presentadora como el momento que nunca olvidarían. Además, para el enlace, Raquel se decantó por un original diseño de Ion Fiz que combinó con un abultado moño bajo. Este lo combinó con un largo velo que llegaba hasta el suelo y que, en algunos momentos, tapaba parte de su rostro. Lo cierto es que el corte del vestido y la originalidad no es de un diseño al uso y la presentadora sorprendió por lo especial de su vestimenta.
Probablemente uno de los momentos más complicados de Raquel fue el fallecimiento de su marido, quien fue encontrado muerto en la casa que compartían en el centro de Madrid. Tras el suceso, la presentadora se tomó un tiempo de descanso y volvió, más tarde, a la televisión. Luego, se conoció que había vuelto a encontrar el amor, aunque esta vez de la mano del productos Matías Dumont. Junto a él ha tenido dos hijos, Mateo y Bruno. Una faceta especialmente difícil, sobre todo por los problemas que tuvo la presentadora para quedarse embarazada y que narró a través de un libro.
Y una gran evolución física
Uno de los puntos de inflexión que hubo en su vida, tanto profesional como personal, fue cuando comenzó a presentar Maestros de la costura. Fue a partir de ese momento cuando la periodista tuvo que hacer gala de su formato y comenzó a sofisticar su imagen pública. Así, comenzó a confiar en diseñadores de renombre como sus compañeros de programa; Caprile y María Escoté. A partir de ese momento, la presencia de Sánchez-Silva en los photocalls se convirtió en la más esperada entre todas las famosas debido a su originalidad y gusto. Es por eso que, consciente de aquello que le favorece más o menos, Raquel suele decantarse por formas geométricas imposibles, mangas abullonadas y diseños ceñidos a su cuerpo.
El otro programa que, también, marcó un antes y un después en su vida fue El desafío, programa de retos en el que apareció la presentadora en su segunda temporada. Así, compartió formato junto a Juan Betancourt, Omar Montes, Jesulín de Ubrique, María Pombo, Norma Duval, Lorena Castell, El Monaguillo y Javier Hernanz. Fue el modelo cubano quien se alzó con el primer puesto, mientras que la de Plasencia quedó como tercera clasificada. El programa supuso un gran reto personal para ella, en la que tuvo que poner todo su esfuerzo en su físico. Es por eso que sus brazos comenzaron a verse más musculados para intentar llegar a todos los objetivos que le proponían desde el formato.
