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Miguel Bosé, la estrella de un acto en el que se defiende la ingesta de lejía para curar el autismo

El cantante vuelve a estar en el centro de la polémica tras acudir a un acto y realizar declaraciones un tanto cuestionables

Miguel Bosé, la estrella de un acto en el que se defiende la ingesta de lejía para curar el autismo

Miguel Bosé

Miguel Bosé lleva años protagonizando polémicas que poco tienen que ver con su carrera musical. El reconocido cantante es, desde hace mucho tiempo, una de las caras visibles de pseudoterapias criticadas por numerosos expertos.

En esta ocasión, el artista, de 68 años, ha saltado a primera línea tras su participación en un controvertido evento en Mallorca, el pasado jueves. Un acto, organizado por Josep Pàmies, en el que se promovió el uso de un derivado de la lejía como supuesto remedio para tratar el autismo, entre otras enfermedades. 

Miguel Bosé, en un evento en el que se defiende el uso de lejía para tratar el autismo

La estrella de este evento fue Miguel Bosé, quien fue captado por las cámaras de TardeAR (Telecinco) a su llegada al polémico acto.

Miguel Bosé llega al evento
Miguel Bosé llega al evento

El evento ya ha sido denunciado por ser peligroso para las personas vulnerables, «ya que pueden caer en manos de estos curanderos y sobre todo ser víctimas de este tipo de remedios que son perjudiciales para la salud», detallan desde el citado programa. La Asociación Círculo Escéptico fue la encargada de poner la querella y Miguel Bosé fue señalado por el Colegio de Médicos.

Los que están al otro lado están acojonados. No me he vacunado ni he vacunado a mis hijos

Estar en el punto de mira por este tema, sin embargo, no parece preocupar al cantante, que fue aplaudido en cuanto salió al escenario, donde confesó no estar vacunado: «Los que están al otro lado están acojonados. No me he vacunado ni he vacunado a mis hijos».

Asimismo, Miguel Bosé defendió el uso de pseudoterapias. El artista contó que pasó por un infierno cuando tuvo que tomar medicamentos tras diagnosticarle una tuberculosis, los cuales le causaron «graves efectos secundarios». «Al final me curé con clorito de sodio. Pasé por un infierno farmacológico», añadió. Ahora, los promotores del evento se enfrentan a más de un millón de euros de multa por prometer curas imposibles. En cuanto a Bosé, parece sentirse cómodo realizando este tipo de declaraciones, pues recordemos que fue muy criticado por su posición en torno al coronavirus.

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