La discreta vida de Jaime de Marichalar: mucho lujo, unido a sus hijos y su relación con la infanta
El que fuera marido de la infanta Elena lleva una discreta rutina entre Madrid y París, huyendo de la fama y los focos
Jaime de Marichalar junto a su hija. | Gtres
Fue en 1987 cuando la infanta Elena, la hija mayor del rey Juan Carlos y la reina Sofía, conoció al que unos años más tarde sería su marido, Jaime de Marichalar. Ambos coincidieron en un curso de Literatura cuando Elena se marchó a París. Antes, la mujer, siempre discreta, había mantenido otros romances que no habían salido del todo bien. Con el paso del tiempo, su relación se fue afianzando, sobre todo porque Jaime conocía muy bien a una de las mejores amigas de la hermana del rey Felipe, Alba Portero, quien estuvo casada con uno de sus hermanos. Es por eso que, al poco tiempo de conocerse, él ya estaba acompañando a la infanta a sus concurso de hípica y haciendo planes juntos por la ciudad de la luz.
A mediados de los años 90, desde Zarzuela, confirmaron lo que ya era un secreto a voces; estaban saliendo juntos. Jaime de Marichalar y Saénz de Tejada nació en Pamplona y ha pertenecido siempre a una familia de posibles ligada a la aristocracia. Tiene seis hermanos y estudió entre Madrid y Dublín. Se licenció en Economía y siguió con su formación en la ciudad de París, una etapa que, sin duda, le marcó para siempre. En noviembre de 1994, se anunció su compromiso con la infanta Elena después de muchos rumores que apuntaban a que la reina Sofía estaba encantado con su futuro cuñado, aunque no tanto el rey Juan Carlos ni la propia Elena, quien no terminaba de dar el paso.
El matrimonio entre Jaime de Marichalar y la infanta Elena
El enlace se celebró en una llenísima catedral de Sevilla y acudieron miembros de todas las Familias Reales de distintas partes de Europa. Por aquel entonces, eran contadas las ocasiones en las que se podía ver a ambos juntos y, además, eran pocas las cosas que tenían en común. A él le apasionaba la moda mientras que ella era una auténtica forofa del deporte. En el verano de 1998 tuvieron a su primer hijo; un niño al que llamaron Felipe Juan Froilán. Casi dos años más tarde vino al mundo Victoria Federica. Durante muchos años, Jaime trabajó en el sector del mercado financiero, más concretamente en la Crédit Suisse First Boston, donde fue nombrado Asesor del Director de Operaciones.
Uno de los momentos más complicados de su vida llegó en las Navidades de 2001 cuando, mientras montaba en bicicleta, sufrió una isquemia cerebral que le dejó parte del cuerpo totalmente paralizada. Otro de los momentos que marcó su vida fue su «cese temporal de convivencia» con la infanta Elena, confirmado por Zarzuela, y que, más adelante, y de forma muy discreta, se convirtió en su divorcio. Fue en noviembre de 2007 cuando desde la Casa del Rey se dio la noticia y, durante los años posteriores, se estuvo hablando de un posible divorcio que tardó mucho en llegar.
Su divorcio, su trabajo y la buena relación con sus hijos
Hasta noviembre de 2009 no se confirmó lo que venía siendo un secreto a voces; tanto la infanta como el que ya era su exmarido habían tomado caminos por separado de «mutuo y común acuerdo». Algo que ratificaron en el mes de noviembre de ese mismo año. El 9 de febrero de 2010 quedaron divorciados legalmente. Lo cierto es que, en todo este tiempo, Jaime de Marichalar siempre ha intentado pasar desapercibido. Las pocas ocasiones que le hemos visto ha sido del brazo de su hija, Vic, o en algún desfile de moda en París. Con sus dos vástagos, el economista mantiene una buenísima y estrechísima relación.
«Cuando hablas con gente que los conoce los describen como niños de una familia desestructurada. No solo porque los padres se hayan divorciado, sino por cómo lo hicieron. Eso a los niños, cuando eran muy pequeños, les marcó muchísimo», confesó la periodista Silvia Taulés en una entrevista. Sobre su lado más personal, han sido varias las mujeres con las que se ha relacionado a Jaime aunque siempre se ha acabado dilucidando que eran sus amigos. Esto sucedió, por ejemplo, con Susana Uribarri, representante de Tamara Falcó o de Ana Obregón, y con Veva Longoria, que está casada con Carlos Perreau de Pinninck.
Probablemente, una de las piezas más importantes de la vida de Jaime de Marichalar son sus amigos. Su círculo más cercano está formado por personas pertenecientes a la jet set pero, también, con gusto para la moda. Como es el caso de Naty Abascal. Si hablamos de su dedicación profesional, como confirman en Divinity, ejerce de consejero de varias firmas de lujo de LVHM, algo que compagina con la dirección de una sastrería a medida y con las relaciones públicas de una lujosa marca de calzado. La última vez que concedió una declaración pública fue en el año 2018, a la revista Vanity Fair, en la que habló de la moda y el lujo. Desde entonces, y sobre todo desde que rompió con la infanta Elena, ha intentado siempre pasar de forma discreta.
