Ágatha Ruiz de la Prada pone en venta su casa con Pedro J.: invernadero y cuatro habitaciones
La diseñadora ha puesto a la venta su magnífico ático con unas impresionantes vistas y decorado con mil colores
Ágatha Ruiz de la Prada ha puesto en venta la casa que compartió con Pedro J. Ramírez por siete millones y medio de euros. La diseñadora ha querido deshacerse de este espectacular ático, situado en uno de los mejores lugares de la ciudad de Madrid. Tal y como informan desde Vanitatis, en estos años, la casa se había convertido en una gran carga para Ágatha quien deseaba, por todos los medios, deshacerse de la vivienda. Es por eso que, ahora, ha llegado el momento y lo ha anunciado en una conocida página web de alquiler y venta de inmuebles, en los que han dado infinidad de detalles sobre la vivienda, que destaca, no solamente por su magnífica ubicación sino, también, por sus vistas y la amplitud de su terraza.
«Este exclusivo ático dúplex es una joya única y singular que refleja a la perfección el incomparable estilo lleno de color, creatividad y vitalidad de su creador, un referente mundial en diseño», explican desde las redes sociales. La casa, además, cuenta con más de 700 metros cuadrados distribuidos en dos plantas con una terraza de unos 100 metros cuadrados y vistas a la ciudad de Madrid. Este fue el lugar en el que convivió la diseñadora junto al periodista, quienes terminaron su relación en el año 2016, momento en el que comenzó su noviazgo con Cruz Sánchez de Lara.
El ático de Ágatha Ruiz de la Prada que se ha puesto en venta
En la terraza, además de tener una zona de descanso, también hay un invernadero de unos 50 metros cuadrados. Además, por si algo destacan las distintas estancias es por su luminosidad. La casa tiene un amplio salón, una sala de estar, una enorme cocina, el comedor, cuatro dormitorios con baños en suite, así como dos aseos de invitados. «Se trata de un hogar diseñado para aprovechar al máximo cada día y compartir momentos agradables con amigos y familiares», confirman en las redes sociales del portal inmobiliario de la vivienda, situada en el Paseo de la Castellana.
«Además de su excepcional diseño interior, la ubicación privilegiada del ático, cerca de boutiques exclusivas y restaurantes gourmet, garantiza una vida urbana animada y emocionante y convierte esta inversión en una oportunidad inmobiliaria», explican. Sin duda, lo más especial de toda la vivienda es su decoración, que sigue manteniendo la esencia de la diseñadora, en la que perviven los colores fuertes. Para poner en venta la casa, Ágatha ha contado con la inmobiliaria de origen francés Kretz Real State, propiedad de una familia francesa que se encarga de ofrecer propiedades de lujo. Es más, como confirman desde el mencionado medio, en los próximos días, la inmobiliaria organizará una fiesta en la propia casa de la diseñadora para promocionar su empresa.
Muchos colores y por siete millones y medio de euros
En todo este tiempo, su residencia ha sufrido distintas modificaciones. Fue en el año 2008 cuando la sometieron a una reforma total gracias al padre de ella, arquitecto de profesión. El ático, además, está distribuido en dos plantas; con una primera zona de recibidor y otra, en la segunda zona, donde se encuentran las habitaciones y una parte más privada. Fue este mismo verano cuando la diseñadora confesó que tenía un comprador para su casa. A pesar de todo, el anuncio en este portal inmobiliario hace pensar que, en ese momento, no se produjo la transacción.
Sin duda, una de las cosas que más llama la atención de la casa son sus colores, especialmente el rosa. Además, el salón cuenta con un sofá en fucsia, con forma de flor y pufs en rojo y rosa. Todos los objetos que forman parte de la estancia tienen la misma forma de corazón que se han convertido en todo un referente. Además de este salón principal, la vivienda cuenta con otra zona muy parecida aunque con un sofá en azul claro y un gran comedor en el que se entremezclan infinidad de colores. También, llama especialmente la atención una gran estantería donde están repartidos los libros, justo alrededor de la mesa de comedor.
Probablemente, uno de los lugares favoritos de la diseñadora es su vestidor. Este está lleno de distintos modelos de tacones en todas sus tonalidades y que, también, se han convertido en parte de su identidad. Otro de sus puntos fuertes son las obras de arte, con cuadros de muchos colores y con distintos toques como los sofás y alfombras.