Los últimos meses de Chiara Ferragni: una pérdida profesional y un divorcio aún no firmado
La influencer ha protagonizado una dolorosa ruptura con el cantante Fedez, al que se ha enfrentado en los tribunales
Chiara Ferragni en una foto en sus redes sociales. | Redes sociales
Casi un año tras el Pandoro Gate la situación legal de la influencer Chiara Ferragni parece esclarecerse en todos su frentes. Los abogados de la bloguera han compartido con la prensa italiana el acercamiento de posturas con su todavía marido Fedez y el proceso judicial del escándalo de los dulces navideños llega a su fin.
2024 ha sido un año de muchos cambios para la empresaria digital a nivel familiar, con el anuncio en febrero de su separación con el rapero Fedez, padre de sus hijos –Leo y Vittoria– tras una relación de 8 años y el complicado divorcio que parece encauzarse. Ahora tiene que asimilar otra marcha, su mano derecha en los negocios Fabio Maria Damato deja el conglomerado. Pero ¿cómo han sido los últimos meses de la influencer?
Del podio de las redes a los juzgados por estafa
La creadora de contenido italiana Chiara Ferragni lleva años gobernando las redes sociales, su puesto insuperable de primera influencer y sus 28,7 millones de seguidores en Instagram la han respaldado en sus numerosos proyectos empresariales de su carrera. Desde la creación de su blog de moda The blonde salad en 2009, Ferragni ha ascendido social y económicamente entre las celebrities tradicionales hasta colocarse en el top 21 de creadores de contenido de 2023 del portal Forbes. Su nombre ha sido sinónimo de éxito y un gran atractivo para marcas de lujo y moda como Louis Vuitton, Tiffany & Co, Lancome, Schiaparelli, Converse, Dior, etc.
Su reputación se vio amenazada en diciembre de 2023 en el sonado Pandoro Gate. Hace un año la empresaria decidió colaborar con la empresa Balocco para producir una edición navideña de sus pandoros, un dulce tradicional italiano similar al panetone, y un huevo de pascua con Dolci Preziosi. Esta versión con glaseado rosa, a juego con la imagen de la influencer, destinaría su recaudación al apoyo del Hospital Regina Margarita de Turín. Los medios italianos rápidamente se percataron de que las empresas Fenice y Tbs Crew, propiedad de Ferragni y responsables del negocio de los dulces, realizaron el pago al centro médico previo a la venta del producto. Además el precio era más elevado de lo habitual en la empresa Balocco, de 4 a 9 euros.
La Fiscalía italiana ha formalizado este octubre los cargos de grave estafa contra la influencer y demás empresas implicadas por no dejar claro cómo y cuánto se facturó con el negocio. Además añade una multa de 1 millón de euros, cantidad que ella considera injusta aunque aceptará para colaborar con la justicia: «Se pueden cometer errores y cuando sucede hay que admitirlo, y si es posible, arreglar el error cometido y atesorarlo. Y eso es lo que quiero hacer ahora», decía en sus redes en el único comunicado público que ha hecho al respecto. El escándalo no se acaba con el pago de la multa pues la justicia italiana ha abierto un proceso penal contra el negocio. La defensa de la italiana está reuniendo más pruebas que debe presentar esta semana y declara en su nombre: «Chiara Ferragni confía en el trabajo de la Justicia y que su inocencia se aclare lo antes posible».
Los apoyos de Chiara Ferragni se desvanecen
En junio se hacía pública la marcha de Fabio Maria Damato del consejo de administración de Fenice y Tbs Crew. El amigo de Ferragni también ha sido su mano derecha en los negocios los últimos 7 años, y ahora deja su puesto voluntariamente para buscar otras oportunidades. Su marcha estaba cerrada desde febrero -aunque dejase de participar en las comunicaciones de la corporación en diciembre-, pero la dirección le pidió permanecer hasta junio y él aceptó para demostrar su «absoluta dedicación, ideas, corazón y cabeza, honrando siempre los valores de honestidad y corrección que me distinguen». Su lugar lo ocupa ahora la madre de Chiara, Marina Di Guardo.
La empresaria ha perdido este año tal vez su mayor apoyo en lo personal, su marido Fedez. Tras meses de crisis la pareja anuncia su separación en febrero y comienza las negociaciones del divorcio, un proceso poco amistoso hasta ahora. El problema central ha sido el acuerdo sobre la crianza y manutención de sus dos hijos, Leo de 6 años y Vittoria de 3, quienes han estado estos meses junto a su madre. Los medios italianos se han hecho eco de un posible consenso entre el rapero y la influencer y que acabaría con el divorcio consensuado en seis meses. Todo indica que este acuerdo consta de un reparto paritario del tiempo con los niños y un igual reparto de las obligaciones económicas hacia ellos.
La aparente resolución de los problemas de la italiana se ha visto truncada por la crisis que viven sus negocios por culpa de los escándalos de la fundadora. Como ha destapado Alessandro Rosica, un instagramer que dedica su cuenta a hablar de famosos en Italia, el merchandising de Chiara Ferragni se está vendiendo a precios de liquidación: «Los cuadernos vendidos a 1 euro en Roma». Y es que los proveedores de papelería desconfían de la legalidad de sus negocios y prefieren cortar relaciones. Como este, muchos otros asociados de Fenice y Tbs Crew les están dejando en una situación delicada que afectará a las cuentas de este año y futuras de los negocios de Ferragni.
