La vida de Pablo Urdangarin en Barcelona: casa nueva y volcado en el deporte y en su relación
El hijo de la infanta Cristina sale, desde hace más de un año y medio, con la estudiante de Medicina, Johanna Zott
Pablo Urdangarin, en una imagen de archivo. | Gtres
Pablo Urdangarin está muy centrado en su carrera como deportista. El hijo de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin reside desde hace más de tres años en Barcelona, ciudad en la que se instaló para seguir con su trayectoria profesional que es, cuanto menos, alentadora. Ahora, como confirman desde Vanitatis, habría sido la infanta Cristina quien ha comprado un piso en la ciudad condal, en el mismo lugar en el que vivieron Cristina e Iñaki en sus primeros años como matrimonio, que destinará a su hijo. Lo cierto es que, en todo este tiempo, Pablo había residido en distintas vivienda de la capital y, por ahora, no había encontrado un lugar en el que se sintiera cien por cien cómodo.
Fue en Barcelona donde Cristina e Iñaki vivieron los primeros momentos de su relación. También, donde se dieron el ‘sí, quiero’. España la abandonaron un tiempo después de casarse y formar una familia y se marcharon hasta Washington. Luego, también han residido en Ginebra. Fue en el año 2012 cuando la familia Urdangarin-Borbón llegó hasta la ciudad suiza después de deshacerse de su impresionante palacete en el exclusivo barrio de Pedralbes, uno de los más caros de la capital catalana. Lo hicieron con la única razón de saldar su conflicto en los juzgados y se fueron a vivir de alquiler a Ginebra.
La nueva casa de Pablo Urdangarin en Barcelona
Su relación se resquebrajó cuando Iñaki entró en la cárcel. En todo ese tiempo, tanto Miguel como Juan, Pablo e Irene vivieron en distintas partes de Europa. Juan y Miguel decidieron poner rumbo a Reino Unido para formarse en la universidad. Mientras tanto, Irene se quedó en Suiza hasta terminar el instituto y, por último, Pablo se trasladó hasta Barcelona cuando fue fichado por el equipo de balonmano de la ciudad. Una decisión de lo más meditada y con la que parece que, ahora, se encuentra muy a gusto. Como la previsión es que Miguel se quede en la ciudad durante mucho tiempo, la infanta Cristina ha decidido adquirir una casa en la ciudad condal.
Se trata de un apartamento en el mismo edificio en el que vivió sus primeros años de matrimonio con Iñaki Urdangarin. Como explican desde Vanitatis, muy cerca de ahí es donde se crio Pablo junto a sus hermanos. Es por eso que su planteamiento no es el de instalarse en España, sino pasar largas temporadas en Madrid. Su residencia sigue estando en Ginebra, donde debe pasar la mayor parte de su tiempo. Aún así, quiere que su hijo tenga una casa en Barcelona, por lo que la transacción se ha cerrado en las últimas semanas. Sí que es cierto que, en estos últimos meses, la infanta Cristina ha estado en innumerables ocasiones en Madrid y se ha instalado en Zarzuela, junto a su madre y a su tía.
Su relación con Johanna Zott y su carrera en el balonmano
Desde el mes de enero ha estado en distintas bodas y, también, en algunos eventos públicos junto a su hermano. El último fue en la fundación La Caixa. Aún así, la compra de este piso no le une aún más a España sino que lo hace, simplemente, porque «no tiene ninguna propiedad a su nombre». Su hijo Pablo, que será quien ocupe la casa, reside en Barcelona desde el verano de 2021. Primero, lo hizo invitado en un piso en el mismo edificio en el que, ahora, la infanta ha comprado una casa. Luego, se mudó a la residencia de unos amigos de sus padres, por el que paga un alquiler «simbólico».
Ahora, Pablo podrá tener más libertad y llevará una vida más independiente. Una vida que, además, comparte con su novia, Johanna Zott. La joven se estrenó en los medios de comunicación el pasado mes de enero cuando acudió a Abu Dabi por el cumpleaños del rey Juan Carlos y salió en las imágenes que se compartieron con la revista ¡Hola! La pareja lleva unida más de un año y medio y Johanna estudia Medicina. Es más, el pasado año estuvo disfrutando de una beca Erasmus en Múnich. En alguna que otra ocasión, Pablo ha reconocido que está «muy contento». Aunque eso sí, ha pasado por momentos especialmente complicados después de la condena de su padre, la relación de Iñaki con Ainhoa Armentia y todas las noticias relacionadas con su abuelo.
Una de las aficiones que comparte la pareja es el deporte. Mientras que Pablo juega al balonmano de forma profesional, Johanna juega al voleibol en el equipo Voley Esplugues, en la categoría Senior B. Además, ambos han estudiado en el Liceo Francés de la ciudad condal, donde se conocieron. De Johanna son pocos los datos que se saben; su madre es médica, unos pasos que la joven quiere seguir, mientras que su progenitor es profesor en una escuela de negocios.
