El verdadero sentimiento de Leonor tras su protagonismo en los Princesa de Asturias
La princesa se enfrenta con nervios a sus apariciones públicas, como el discurso de los Premios Princesa de Asturias
La princesa Leonor ya está de vuelta en la Escuela Naval de Marín tras la intensa semana de los Premios Princesa de Asturias. Durante tres días la heredera ha participado en numerosos actos públicos en relación con los galardones, a veces acompañada de la Familia Real y en otros casos en solitario. Estos días ha probado su desempeño como figura institucional sin el amparo de sus padres y su hermana.
La agenda de Leonor en Asturias concluía el sábado con la visita a Sotres. Esta localidad ha sido elegida Pueblo Ejemplar de Asturias 2024 por la conservación de su patrimonio estructural, paisajístico e industrial de una forma sostenible y por el impulso de la dinámica sociocultural. Los reyes y sus hijas conocieron el pueblo, su cultura y su gente en una jornada relajada donde pudimos ver a la Leonor más natural, charlando en tono distendido con los lugareños y compartiendo momentos con su hermana, ahora que viven separadas en Galicia y Gales.
Leonor vive cambios muy importantes
En tan solo un año la princesa Leonor ha adquirido un mayor protagonismo desde su 18 cumpleaños el pasado octubre. Este cambio de etapa es intencional y lo está ejecutando según los mismos pasos que dio su padre en su día. El mismo día que adquiría su mayoría de edad jura la Constitución ante las Cortes Generales, comprometiéndose a desempeñar fielmente sus funciones, guardar y hacer guardar la Constitución. Al tiempo comienza su formación militar, un programa personalizado de tres años pasando por las academias de Zaragoza, Marín y San Javier. Esta experiencia le capacitará para ser Capital General el día que herede la Corona. Este último año la princesa ha visto hechos realidad los planes que sus padres llevan fraguando años para la continuidad de la monarquía española.
Entre estos planes está aumentar su presencia en los actos públicos de la Familia Real, pudiendo representar a la Corona en solitario. Así la hemos podido ver esta semana en Oviedo cumpliendo con la programación de los Premios Princesa de Asturias. Ha recibido la alcaldía honoraria de Oviedo y la medalla de Asturias en dos actos a los que acudió sin el respaldo de su familia, demostrando que Leonor ya ejerce plenamente su papel de heredera y sabe desenvolverse como se espera de ella. Es por eso que, tal y como confirman en Monarquía Confidencial, la heredera al trono ha vivido infinidad de sentimientos en los últimos días, entre los que más predominan cierta «presión».
El discurso de Leonor en los Premios Princesa de Asturias
El evento central para Leonor ha sido la entrega de los Premios Princesa de Asturias, que presidía junto a su familia por primera vez desde que adquirió este nuevo nivel de responsabilidad. Por primera vez se la encargó un discurso que agradeciera a todos los premiados y clausurase la gala, una tarea que también desempeñó su padre a su edad y demuestra la categoría de la princesa dentro de la Fundación Princesa de Asturias -de la que es presidenta de honor desde 2014- y la estructura institucional del país.
El discurso que pronunció la princesa el viernes dejó ver varias realidades sobre la nueva Leonor. Tenía mucha presión sobre esta intervención y los nervios le jugaron una mala pasada, se trabó varias veces a pesar de su preparación de oratoria y locución, de la que ha participado la reina Letizia con su experiencia profesional ante las cámaras. Dejó ver que sigue siendo una chica de 18 años con una exposición anormal para su edad y unas expectativas que sabe que debe cumplir. Toda la educación que ha recibido la convertirá poco a poco en una mejor oradora como su madre y en una figura de autoridad como su padre, pero de momento este discurso en Oviedo ha cumplido su función: comunicar el valor institucional de Leonor e involucrarla aún más en la vida pública.