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La lujosa casa de Lara Dibildos en la Castellana que heredó de su madre con doce habitaciones

La actriz hederá dos pisos de su madre, Laura Valenzuela, quien falleció el 17 de marzo del pasado año en Madrid

La lujosa casa de Lara Dibildos en la Castellana que heredó de su madre con doce habitaciones

Lara Dibildos en una imagen de sus redes sociales.

Lara Dibildos vivió una etapa muy volcada en sus apariciones públicas. Su relación, ya extinta, con Álvaro Muñoz Escassi hizo que, durante mucho tiempo, estuviera en el foco de la polémica bajo los rumores de infidelidad. Este mismo verano, cuando se conoció que el exjinete había roto su relación con María José Suárez, se le volvió a preguntar a Lara por la que fuera su pareja y padre de su segundo hijo. Para él, solamente tuvo palabras de agradecimiento y admiración. Estos últimos meses han sido especialmente duros para Lara, sobre todo desde la muerte de su madre, Laura Valenzuela, en el mes de marzo del pasado año. Aún así, Lara ha vuelto a ilusionarse y encontrar el amor y lo ha hecho con el que fuera pretendiente en Mujeres, hombres y viceversa, Carlos Maturana.

Lo cierto es que la muerte de su madre fue un auténtico mazazo para Lara. Ahora, al pasar el tiempo, Lara ha podido rehacer su vida personal. Además, lo ha hecho en una de las propiedades que le dejó su madre, en el centro de Madrid, más concretamente en el Paseo de la Castellana, uno de los lugares mejor valorados de la capital. También, se quedó con un estupendo chalé en Marbella, en la costa del sol, que vendió en el mes de diciembre. Es allí donde, además, convive con su hijo, Álvaro, con su pequeño perro y con su actual pareja. Y, también, es allí donde ha concedido sus últimas declaraciones sobre su ex.

La casa de Lara Dibildos en el Paseo de la Castellana

Sí que es cierto que, en todo este tiempo, Lara no ha dado muchas explicaciones de cómo es su piso por dentro, algo que hemos podido descubrir a través de sus redes sociales. La casa cuenta con mucha amplitud y unas increíbles vistas a una de las arterias principales de Madrid. Probablemente el salón es uno de los lugares más especiales para Lara. Es ahí donde pasa más tiempo, tanto junto a su pareja como a su hijo. La zona está decorada en colores claros y en la que predomina el sofá, en tonalidades más suaves como blanco y beige. Otra de las estancias más especiales es la cocina que cuenta con un diseño muy moderno, una especie de isla y una campana, totalmente mimetizada con el ambiente y que le da un toque más industrial.

Sin ninguna duda lo que también llama especialmente la atención es la amplitud de cada una de las estancias y la impresionante terraza. Esta está totalmente decorada para disfrutar de los días de mejor tiempo y cuenta con una zona de lectura y con el suelo cubierto de césped artificial. Además, la terraza también tiene unos bancos y unos sillones, una silla y una mesa para disfrutar de las comidas y cenas durante la temporada estival. Para la temporada de más calor, la casa también cuenta con una zona común que posee una piscina privada, donde se da algún que otro chapuzón, como ella misma ha mostrado en sus redes sociales.

Más de 250 metros, doce habitaciones y un estupendo dúplex

También, llama especialmente la atención la distribución y la amplitud de la casa que cuenta con 500 metros cuadrados y doce habitaciones. Además, el piso está dividido en dos plantas, por lo que es un dúplex. Es por eso que el valor de su propiedad llega a alcanzar los cuatro millones de euros. En un primer momento, la casa se pensó para que pudieran vivir tanto Lara como su madre de forma independiente. Es por eso que se trata de dos pisos, de 250 metros cuadrados cada uno, que tienen cada uno su entrada. Lara decidió vivir en el piso de arriba con seis dormitorios, cuatro baños y esa impresionante terraza de la que tanto hablamos. Mientras tanto, Laura Valenzuela residió en la parte inferior con seis habitaciones, dos baños, una amplia cocina conectada al salón y varias terrazas totalmente exteriores.

Tras la muerte de su madre, Lara decidió darle un giro de 180 grados a las dos casas, reformando y pintando cada una de las estancias. Además, también decidió cambiar algunos muebles y sustituirlos por otros más modernos. Además, el dúplex está rodeado de una zona ajardinada, perfecta para pasear y para pasar tiempo junto a su mascota. De esta manera, tras la muerte de su madre, Lara puede hacer uso de ambas casas, lo que es una gran idea para ampliar su patrimonio y, sobre todo, el espacio que ya tenía en su residencia. Además de Álvaro, Lara es madre de Fran, nacido de su relación con Fran Murcia, a quien conoció en la boda de unos amigos. Hace un tiempo, el joven decidió que su camino estaba en la música y, por eso, se marchó a Estados Unidos a formarse como productor. Siguiendo los pasos de su hermano Álvaro quien también ha estudiado al otro lado del charco con una beca de fútbol.

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