Alejandra Martos, la hija más discreta de Raphael: restauradora en el Thyssen y dos hijos
Tanto Alejandro como sus hermanos, Jacobo y Manuel, se han mantenido al lado de su padre en estos difíciles momentos

Alejandra, Raphael y Natalia Figueroa en una imagen de sus redes sociales.
Raphael está viviendo uno de los momentos más complicados de su vida. El cantante fue hospitalizado hace más de diez días después de sentirse indispuesto mientras grababa el especial de Navidad de La revuelta. Ahora, se ha conocido su diagnostico; un linfoma cerebral por el que ya se está tratando y que hará que se mantenga lejos de los escenarios en el próximo 2025. La recomendación de los médicos ha sido clara; el cantante tendrá que tomarse la vida de forma más pausada, relajada y no someter a su cuerpo a tantos viajes y compromisos. Algo de lo que ahora son muy conscientes sus hijos, Jacobo, Manuel y Alejandra, quienes se han mantenido al lado del cantante en todo momento y han sido los protagonistas de cada visita al hospital.
Tampoco se ha despegado de él su mujer, Natalia, quien ha estado en todo momento junto al intérprete de Mi gran noche. Probablemente de los tres vástagos, la más desconocida es Alejandra, quien siempre se ha mantenido en un segundo plano. Al igual que sucede con Jacobo. Mientras tanto, Manuel sí que ha tenido más presencia, sobre todo en televisión y después de participar en Operación triunfo. Alejandra y Jacobo siempre han preferido mantenerse a la sombra de su padre pero, ahora, debido a la situación que están viviendo han tenido que enfrentarse a los medios de comunicación para confirmar la última hora del cantante.
Alejandra Martos, la hija mediana de Raphael que es restauradora

Además, han sido constantes las visitas de los tres al Hospital 12 de Octubre. Natalia nació a mediados de los años 70 en Madrid. Llegó al mundo un año después de su hermano mayor, Jacobo. Por aquel entonces, Raphael era uno de los cantantes con más influencia de nuestro país. Además, se había casado con la periodista y escritora Natalia Figueroa en Venecia. Alejandra creció en la casa familiar en la urbanización de Montepríncipe, en la localidad de Boadilla del Monte, una impresionante residencia que tenía un gran jardín en el que se han celebrado infinidad de eventos. Y no solamente eso. La casa de Raphael se convirtió, durante mucho tiempo, en un lugar de reunión de distintos políticos y cantantes.
Durante su infancia y su juventud, su padre tuvo que cumplir con sus compromisos musicales fuera de España. Es por eso que el tiempo que pasaba con sus retoños era escaso. Aún así, intentó estar presente en todos los momentos importantes. Además, siempre contó a su lado con su madre, Natalia. Cuando creció y tenía edad de decidir cómo quería encaminar su vida escogió el camino de la restauración. Así, desde hace más de 20 años trabaja en el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza ejerciendo de restauradora.
Su boda con Álvaro Arenzana, una separación y dos hijos
Si hablamos de su lado sentimental, Alejandra se casó en 2001 con Álvaro Arenzana, en lo que se convirtió en una boda que marcó el panorama social. La ceremonia, como no podía ser de otra manera, tuvo lugar en la casa de Montepríncipe de Raphael y, además, fue oficializada por el mismo sacerdote que casó al cantante y Natalia Figueroa en 1972. Para ese momento tan especial, Alejandra eligió un vestido de novia de Roberto Torretta y fue Raphael quien le acompañó hasta el altar, del brazo. La primera hija de la pareja vino al mundo en 2003 y la llamaron Manuela. Es más, ha sido ella quien, en los últimos meses, ha acompañado a su abuelo en infinidad de eventos públicos. Posando incluso juntos en varios photocalls.
En el año 2005, Alejandra y Álvaro dieron la bienvenida a su segundo hijo, un niño al que llamaron Carlo. En el año 2016, la familia tomó la decisión de mudarse hasta México por cuestiones laborales. Lo cierto es que, aunque en un primer momento parecía que el matrimonio gozaba de una gran estabilidad, finalmente acabaron por separar sus caminos. Su divorcio se produjo en 2019 y, en todo este tiempo, Alejandra se ha dedicado a cuidar de sus hijos y de su carrera profesional. Además, Alejandra también ha decidido empezar con el mundo de las redes sociales, colaborando con varias marcas de moda.