La última hora sobre la herencia de Isak Andic: así se ha repartido su fortuna entre sus tres hijos
El que fuera dueño de Mango ha dejado atrás un patrimonio que alcanza los 8.000 millones de euros para sus tres hijos

Isak Andic en una imagen de archivo. | Gtres
El fundador de Mango, Isak Andic, murió a principios de este 2025 tras un accidente en la montaña. El empresario, de origen turco, se encontraba dando un paseo, junto a su hijo, por unas montañas cercanas a Barcelona y cayó por un terraplén que hizo que perdiera la vida en el acto. Su muerte dejó desolado, no solamente al mundo empresarial, sino, también, a su familia. Tras su muerte, las autoridades comenzaron una exhaustiva investigación para saber qué había pasado realmente y cómo cayó Andic, teniendo en cuenta que ya había paseado en distintas ocasiones por el lugar, conocía el terreno y, sobre todo, era un experimentado deportista. En ese momento, se puso el foco en su único acompañante; su hijo Jonathan, con quien había tenido sus más y sus menos en todos estos años.
En las últimas semanas, además, han salido a la luz una serie de informes que se han convertido en reveladores para poder esclarecer qué pasó con Andic y si cayó o no de forma fortuita. Isak Andic siempre tuvo sus decisiones empresariales muy claras. Convertido en uno de los hombres más ricos de España llevó a cabo la estrategia para convertir Mango en todo un referente en la industria de la moda. Todo esto hizo que se codeara con personalidades muy reconocidas de todo el mundo y llevaba una vida lo más exclusiva y sofisticada posible. Su fortuna ha hecho que su herencia se convierta en un tema central tras su muerte, sobre todo porque esta podría marcar la diferencia entre su pareja y sus hijos.
La herencia de Isak Andic

Y es que, tal y como confirman desde la revista Lecturas, sus hijos ya conocen los detalles de su testamento. Así, como han contado fuentes cercanas a la familia, el empresario habría dejado algo más del 31% de la empresa Mango a cada uno de sus tres hijos, Jonathan, Sarah y Judith, quienes se han repartido el 95% de la empresa. El 5% ha sido entregado a Toni Ruiz, el presidente interno de Mango. Además, el hijo mayor de Isak Andic, Jonathan, que fue quien presenció la caída, será el encargado de ejercer la presidencia de la sociedad patrimonial. Por su parte, su hermana mediana, Judith, asumirá el puesto como apoderada y vocal mientas que Sarah será la secretaria y encargada de la sociedad inmobiliaria.
De esta manera, antes de fallecer, Isak Andic decidió dejar todo bien atado para el día en el que faltara. También, Isak ha dejado a Estefanía Nunth parte de su legado que, por el momento, no ha trascendido. Y es que, desde que se produjo el fallecimiento, han sido contadas las ocasiones en las que la familia Andic ha hablado con los medios de comunicación. Así como tampoco los portavoces de Mango, quienes no han querido dar ninguna declaración sobre las últimas voluntades de su fundador, manteniendo todos estos detalles en un segundo plano.
Un patrimonio de 8.000 millones de euros entre sus tres hijos

Aunque eso sí, parece ser que los tres hijos están conformes la decisión de su progenitor, que tampoco les ha sorprendido. Y es que el propio Toni Ruiz es el que ha confirmado que el empresario dejó todo «totalmente ordenado», tanto «a nivel de empresa como en la familia». De los tres es probablemente Jonathan quien ha estado más vinculado a la empresa de moda, ya que, también, es director de Mango Man y miembro del Consejo de Administración y del Comité de Dirección de la Empresa. La fortuna que ha dejado atrás Isak Andic alcanza los 8.000 millones de euros, de los cuales la mitad corresponde a Mango. El resto se encuentra en un Holding, cuya presidencia ha asumido Jonathan.

Fue hace unas semanas cuando la jueza decidió reabrir el caso de la muerte del empresario. Así, Jonathan fue sometido a un segundo interrogatorio, ya que se encontraron dos pequeñas contradicciones que ponían en jaque su testimonio. La primera, como confirman en la mencionada revista, tiene que ver con la ubicación del coche y la segunda con la llamada al 112. Y es que las autoridades analizan por qué Jonathan llamó primero a su madrastra que a los servicios de urgencias. A pesar de todo, los investigadores tienen claro que la caída se produjo de forma accidental, tal y como reveló la autopsia.