El plato favorito de Broncano que es típico español, fácil de hacer y bueno para el sistema
El presentador de TVE siempre ha presumido de ser un apasionado de la gastronomía de nuestro país de la que disfruta

Broncano, en una imagen de archivo. | Gtres
David Broncano es un auténtico apasionado de la cocina de nuestro país. Y es que, aunque siempre intenta pasar inadvertido, han sido muchas las ocasiones en las que hemos podido ver al presentador de TVE disfrutando de un restaurante con sus amigos -el último, Alejandeo Sanz- o junto a su pareja, la actriz Silvia Alonso. Además, en su propia programa de televisión también va dejando pequeñas píldoras en las que confiesa algunos datos desconocidos de su vida. Fue hace poco más de un mes cuando, por ejemplo, aparecieron en el teatro sus padres, quienes siempre han sido muy celosos de su intimidad, pero que no tuvieron problema en contar algunas anécdotas de la vida del cómico.
Y es que David siempre ha intentado proteger un poco todo lo que tiene que ver con su parcela más íntima. Sabemos que cuando no está presentando es un auténtico apasionado del deporte. Es por eso que en invierno practica esquí pero, también, tenis. Durante la temporada de mejor tiempo se dedica a hacer rutas de montaña junto a su pareja y a sus amigos, lo que ha hecho que viaje por todo el mundo y, también, disfrute de la gastronomía, tanto nacional como internacional. Y es que David se ha confesado como un auténtico apasionado de un plato muy castizo, que se puede hacer fácilmente y que es muy reconocido tanto fuera como dentro de nuestras fronteras.
El plato favorito de David Broncano

En alguna que otra ocasión, David ha hablado que uno de sus platos favoritos de la gastronomía española son los torreznos, tal y como apuntan en la revista Lecturas. Es decir, una tira de panceta, perfectamente adobada, y crujiente que se toma en Castilla y León, especialmente en la provincia de Soria y que hace las delicias de todos los aficionados a la carne. Encontrar una buena panceta no siempre es fácil y será eso lo que determine la calidad del plato. Aunque eso sí, también es muy importante, además de dar con una materia prima de primera calidad, saber prepararlo. Y es que esta parte será la más complicada y requerirá cierto tiempo.
Con el paso del tiempo, los torreznos se han convertido en un plato muy versátil. Y es que puede servir como entrante, de aperitivo o de acompañamiento a algunos platos. El de por excelencia, las patatas revolconas, en el que se mezcla la panceta con el chorizo y la morcilla y la patata con pimentón, que hace que sea un bocado sedoso y muy compensado. Pero, también, en su versión más moderna, puede tomarse el torrezno en un taco o con toques agridulces.
Cómo preparar unos buenos torreznos
Lo cierto es que la panceta es una de las partes más sabrosas del cerdo y en la que se puede encontrar cierto equilibrio entre magro y grasa. Además, la podrás encontrar ya adobada o hacer el proceso tú mismo en casa, que llevará más tiempo. También, podrás hacer uso de una freidora de aire, que hará que el plato se termine en menos tiempo y quede con una apariencia muy parecida a como si hubiera pasado por el horno. Esto te ayudará a recortar tiempos. Aunque eso sí, en lo que no podremos escatimar será en la calidad del cerdo., algo que tiene muy en cuenta Broncano. Para ello, tendremos que hacernos con un par de tiras de panceta, en nuestra carnicería de confianza, y que tengan un buen grosor. Esto será fundamental porque hay que recordar que no utilizarás la carne para hacerla a la barbacoa sino que deberemos conseguir una apariencia crujiente y blandita.

Una vez que tengamos nuestras tiras preparadas será esencial airearlas. Es por eso que tendremos que sacarlas de la nevera con un tiempo determinado y cuánto más secas estén, más positivo será para su elaboración. Una vez que estén preparadas hay muchas formas de hacer los torreznos. La más tradicional, la que gusta a Broncano, es combinando el horno con la sartén. Una de ellas es poniendo la panceta, con la corteza hacia arriba y en vertical, sobre un tupper de cristal. De esta manera podemos meterlo en el horno y conseguiremos que las tiras se queden erguidas. En el horno estarán el tiempo suficiente para que en la corteza comiencen a aparecer unas pequeñas burbujas, lo que nos indicará que esta parte ya se está haciendo. Una vez que veamos que ya ha aparecido esa parte crunchy, lo sacaremos del horno.
El truco para que te salgan crujientes
El siguiente paso será poner una buena cantidad de aceite en una sartén y calentarlo a una potencia alta. Cuando esté a la temperatura adecuada se incorporarán los torreznos primero por el lado de la corteza, luego por la parte inferior y, seguido, tanto por el verso y reverso. Lo importante es que se haga bien pero que no se quede especialmente seco, ya que tendemos que poder seguir disfrutando de la parte sedosa de la grasa. Una vez que veamos que tiene un color morenito y que, sobre todo, está crujiente por fuera, lo deberemos sacar a un plato con un papel para que absorba todo el aceite. Luego, se cortará en pequeños trozos y podrá tomarse tanto caliente como frío. Además, no hay que olvidarse de salarlo, que eso ya irá al gusto del consumidor.
Mucho se ha hablado del torrezno y, sobre todo, de las propiedades del plato favorito de Broncano. Y es que la revista Plos One confirmó en su momento que tiene infinidad de beneficios. Entre ellos que ayuda a reforzar el sistema inmunológico pero, también, mantiene la salud cardiovascular. Evidentemente, con un consumo responsable e intentando no utilizar en la elaboración distintos productos que le aporten aún más grasa. En ese caso, por ejemplo, podremos optar por hacer los torreznos en la AirFryer. Los torreznos son ricos en ácido oleico monoinsaturado que pertenece a los ácidos grasos omega 9 y se caracteriza por su alta estabilidad a la oxidación. Además, está presente en el aceite de oliva y otros alimentos como el aguacate o los frutos secos.