El día que confundieron a Kate Middleton con una asistente del príncipe Guillermo
En la época de las videollamadas y las mascarillas, los príncipes de Gales vivieron una confusión con su identidad

Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton, príncipes de Gales, en 2020. | Gtres
Esto puede ser sorprendente para algunos, pero Kate Middleton no es reconocida por el 100% de los ciudadanos ingleses. La princesa de Gales es uno de los rostros más visibles de la Casa Real británica y esto le supone una exposición inusual para cualquier otra persona. En su posición es fácil acostumbrarse a ser reconocida por las calles del país, en el colegio de sus hijos o durante sus vacaciones en alguna isla perdida del Caribe. La mujer del príncipe Guillermo es una figura pública y esencial en la vida política de Reino Unido, al igual que su marido o que la pareja de monarcas, Carlos III y Camila. Pero hubo un día en el que no fue reconocida.
La revista ¡HOLA! ha recordado esta entrañable anécdota de Kate Middleton. En 2020 visitó junto a su marido la residencia de ancianos Shire Hall de Cardiff. Compartieron una jornada con sus residentes, ancianos que por su avanzada edad pueden tener unas capacidades cognitivas disminuidas. Las circunstancias de la visita tampoco ayudaban a una comunicación fluida. Por la época en la que efectuaron su visita, Kate y Guillermo llevaban sus caras cubiertas con mascarillas. El grupo que se reunió también debía mantener una distancia de seguridad para evitar contagios de covid en los miembros de la realeza y en los mayores, que eran más vulnerables.
Una divertida conversación sobre Kate Middleton
Una de las mujeres que vivían en la residencia provocó la curiosa anécdota. Se llamaba Joan Drew-Smith. La mujer estaba hablando de frente con Guillermo y Kate y no recordaba que ya habían coincidido en otro evento similar, una quedada que hicieron meses atrás mediante videollamada. «Hola Joan, ¿recuerdas que jugamos al bingo contigo? ¡Dijiste que no éramos muy buenos!», dijo el príncipe heredero. Quiso ayudar a la mujer a recordarles. La mujer respondió «francamente» con un ‘sí’ y una coletilla que ya se llevó titulares en su día: «Hiciste un trabajo de mierda». Los príncipes supieron salir de la situación al tomarse el comentario con humor.
La conversación siguió con un comentario de Guillermo sobre las mascarillas. «Tenemos que usar mascarillas debido al virus, pero a veces es difícil escuchar cuando no puedes ver la boca de alguien», se excusó. Joan no estaba del todo conectada con el tema de la conversación y cambió el foco a otro punto más interesante para ella, como la mujer que acompañaba al príncipe y que estaba sentada a su lado, más callada durante el encuentro. Lanzó una divertida pregunta que ya ha pasado al libro de mejores anécdotas de los de Gales: «¿Es esa tu asistente?», refiriéndose a Kate Middleton. La princesa fue rápida en reaccionar. Esbozó una sonrisa que si bien estaba tapada por la mascarilla, se dedujo de su tono de voz y las típicas arrugas de la risa que se formaron en sus ojos. «¡Soy tu asistente! ¡Lo soy desde hace mucho tiempo!».

El papel de los príncipes de Gales durante la pandemia
Más tarde, el príncipe William comentó con cariño al personal de la residencia: «Adoro a Joan, es brillante. Ojalá todos fueran tan honestos como ella». Joan fue paciente del centro en Cardiff durante los años de la pandemia. En el momento de este divertido episodio tenía 87 años. La familia real tenía por costumbre visitar a los ancianos, niños o pacientes de hospitales y otros centros de ayuda a lo largo de todo el país. Durante la pandemia tuvieron que adaptarse a las restricciones y cambiaron sus visitas por llamadas, como la que hicieron con Joan en la que jugaron al bingo de forma telemática. Estos actos públicos dan visibilidad a los centros y a los problemas de sus residentes, además de ayudarles con un día de entretenimiento y anécdotas que contar.
El papel de los príncipes de Gales en 2020 fue crucial para la Casa Real. La reina Isabel II todavía vivía pero la preocupación por su salud no le permitía estar a pie de calle en estos eventos. El entonces príncipe Carlos tenía una posición similar. Se contagió hasta dos veces de COVID, una en marzo de 2020 y otra en 2022, y se llegó a temer por su estado. Estas limitaciones ponían a Guillermo y a Kate como los representantes más activos de la familia real. La popularidad del príncipe heredero era superior a la de su padre y todavía creció más en 2022, el año en que se colocó en primera línea de sucesión tras la muerte de su abuela y la coronación de su padre.