Juan Carlos I comparte descanso y vela con la infanta Elena mientras evita ver a Leonor
El rey emérito ha viajado a España por cuarta vez en lo que va de año y el domingo regresó a Abu Dabi

El rey emérito Juan Carlos I junto a su hija mayor, la infanta Cristina, en Sanxenxo, Pontevedra. | Europa Press
Juan Carlos I vive en Abu Dabi, no es noticia, pero cada vez más está viajando a España a disfrutar de su vida pre-exilio. Este mismo fin de semana ha pasado unos días en Pontevedra, rodeado de su gente y participando en las jornadas de vela que tanto le gustan. En algunas de estas travesías por las aguas de Sanxenxo ha tenido una compañera inigualable. Se trata de su hija mayor, la infanta Elena, que ha viajado de Madrid a Galicia para reencontrarse con su padre una vez más. Esta camarada bien podría haber sido su nieta Leonor, que el domingo llegaba a la misma provincia tras terminar su formación militar naval, pero el encuentro no se produjo.
Esta es la cuarta vez que el rey emérito visita España en lo que va de año. Desde enero se le ha visto llegar e irse del país siguiendo siempre un patrón en sus viajes. Su modus operandi se resume en: una llegada discreta en avión, una estancia de tres a cinco días en casa de sus amigos más cercanos, días enteros de fragatas en los puertos gallegos, una marcha también discreta. Antes del viaje que hoy se relata, el emérito ha visitado nuestro país a mediados de marzo, a finales de abril y a mediados de mayo.

Un viaje mano a mano con su la infanta Elena
El emérito aterrizó el pasado jueves 10 de julio en el aeropuerto de Peinador en un vuelo procedente de Logroño, según informa 20 minutos. Desde allí se trasladó por carretera hasta Sanxenxo, donde tiene amarrado el Bribón, el barco de 6 metros de eslora del que es patrón. Como se dice, su visita de este mes ha estado marcada por los días en barco y los reencuentros con su círculo de confianza. Esta vez se ha dejado ver junto a su amigo Pedro Campos por el puerto deportivo de esta turística localidad pontevedresa. Juan Carlos I confía en este hombre para compartir los pocos días que pasa en nuestro país, ya sea a bordo de un barco o almorzando juntos en la casa del gallego.
La prensa allí presente han captado a una compañera de fragatas aún más comentada, su propia hija, la infanta Elena. Padre e hija se reencontraron el sábado en el patalán del Real Club Náutico y compartieron un especial saludo que no ha pasado desapercibido para las cámaras. La hermana del rey Felipe VI empieza inclinándose ante su padre, haciendo una reverencia en señal de respeto, y luego comparten dos besos calurosos en las mejillas. Compartieron descanso y vela hasta el domingo, cuando ambos regresaron a sus respectivos hogares, una en Madrid y el otro en los Emiratos Árabes.

Juan Carlos I evita ver a su nieta Leonor
Quien no formó parte del reencuentro familiar fue Leonor. La princesa de Asturias se encontraba al otro lado de la ría de Pontevedra, a escasos 25 kilómetros de distancia por carretera, en la ciudad de Marín. Llegó el mismo domingo 13 a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano para poner punto y final a su formación naval. Minutos después su abuelo partía rumbo Abu Dabi sin haber planeado un encuentro con su nieta, Princesa de Asturias y heredera de su legado institucional.
La última vez que Juan Carlos I y Leonor se vieron fue en septiembre de 2024. Aquella vez ocurrió una reunión familiar y privada en Marín en la que también participaron el rey Felipe y la reina Letizia. Antes de este breve encuentro llevaban un año sin compartir estancia, desde su celebración en común del cumpleaños de la heredera el 31 de octubre de 2023. Las relaciones entre la Casa Real y el rey emérito no están en su mejor momento. Que el abuelo evite ver a su nieta aun estando a media hora de distancia es síntoma de un rechazo intencionado de retomar una unidad familiar.