Por qué la princesa Leonor todavía no lleva tiara: su gesto que la distancia de las otras ‘royals’

La princesa Leonor no es una royal cualquiera. Lo cierto es que, si echamos la vista atrás, su educación ha distado mucho de la que han recibido las princesas de otras casas europeas. La hija mayor de los Reyes no celebró una puesta de larga por su 18 cumpleaños, ni tampoco ha acudido a ninguna de las otras fiestas que sí que han organizado las herederas de, por ejemplo, Bélgica u Holanda. Otra de las cuentas pendientes de la princesa es lucir uno de los símbolos que más representa a las Casas Reales; la tiara. Y es que, por el momento, Leonor se ha resistido a llevar esta joya que, sin duda alguna, marcaría un antes y un después en sus looks elegidos para los eventos más importantes y las cenas de gala.

Y es que usar este accesorio sería un salto directo a la madurez, algo que, por el momento, parece ser que no desean desde la Familia Real. Sí que es cierto que tanto Letizia como Felipe han querido criar a sus dos hijas en un ambiente lo más normal posible. Aunque eso sí, sin olvidar su condición y enfocadas en su formación. Es por eso que siempre han puesto cierta distancia con otras Casas Reales, en las que las herederas al trono ya han comenzado con una fuerte participación dentro de los eventos de la Corona y, también, se han unido a viajes y visitas internacionales. También, hay otras fuertes razones que han condicionado la ausencia de tiara en la vida de la princesa Leonor.

Por qué Leonor no ha llevado nunca tiara

La primera de ellas tiene que ver con el protocolo real tradicional. En las monarquías europeas más conservadoras —como la española o la británica—, el uso de tiaras ha sido históricamente reservado a mujeres casadas. Es un símbolo visual del estatus conyugal, y solo tras contraer matrimonio se considera apropiado lucirla en actos oficiales. Por eso, aunque Leonor es heredera de la Corona y por lo tanto tiene ese privilegio incluso en soltería —a diferencia de quienes se incorporan a la familia real tras casarse—, la tradición dicta que se reserve su uso a eventos muy especiales y relacionados con el matrimonio.

Una de las piezas más importantes del joyero real es la tiara Flor de Lis que ya ha lucido la reina Letizia en alguna que otra ocasión. Se trata de una joya emblemática diseñada por Ansorena y encargada por Alfonso XIII para Victoria Eugenia. Según su testamento, esta tiara debe legarse de reina a reina, por lo que Leonor no podrá usarla hasta que ella misma ocupe el trono como reina de España. Y es que, además, aunque Leonor ya ha alcanzado la mayoría de edad, aún no ha sido parte de cenas de gala o actos de Estado adecuados para el uso de tiara. Por ejemplo, en su viaje oficial en solitario a Lisboa en julio de 2024, el programa incluyó únicamente un almuerzo informal sin una cena de gala, eliminando la posibilidad de lucir joyas pesadas o tiara. Es por eso que, por el momento, todavía tendremos que esperar para ver a Leonor con esta joya recogiendo su sello.

Cuándo la podrá llevar y qué opciones tendría

En los últimos meses, la princesa ya ha comenzado a adquirir más responsabilidades. Por ejemplo, durante los Premios Princesa de Girona —que se celebraron en julio—, tanto la princesa como la infanta participaron, en solitario, en diversos eventos. También, hizo su primer viaje oficial en solitario a finales del verano pasado. En el mes de septiembre, la princesa comenzará con su último año de formación en la Academia del Aire de San Javier, por lo que todavía se retrasará hasta dedicarse, al cien por cien, a sus funciones dentro de la Corona. Pero ¿cuándo se podrá estrenar con las tiaras? Este momento podrá llegar con una cena de gala en un viaje oficial, es decir, cuando acompañe a los Reyes en visitas de Estado que incluyan cenas de gala —en palacios europeos, por ejemplo—. También, cuando asista a alguna boda real europea o en su propio matrimonio. Este último es el, tradicionalmente, más esperado; la primera tiara que luce una princesa suele ser la de su boda.

En el momento en el que la princesa decida dar un paso adelante se encontrará con varias opciones de tiara. Sí que es cierto que, por el momento, la Flor de Lis estará reservada a reinas. Es por eso que Leonor podrá lucir la Tiara Princesa, de esmeraldas y diamantes, regalo de Franco a Sofía. Es ligera y cuenta con una historia entre los jóvenes Borbones. Además, sería muy simbólico que la princesa se estrenara con ella. La Tiara Prusiana es más sencilla, de estilo bandeau y perteneció a la reina Sofia. Fue la que Letizia eligió para su boda en 2004 y sería ideal para un debut discreto. Por su parte, la Tiara Cartier —o rusa— es de líneas más llamativas, en diamante y platino. Está, también, muy ligada a las reinas consortes de España. Por último, la Tiara Floral es propiedad de la familia del rey Juan Carlos y también suele considerarse una de las opciones más accesibles para las princesas herederas.

Así, lo más probable es que Leonor se estrene con una tiara ligera y sobria —la prusiana o la floral— en una cena de gala internacional, antes de pasar a piezas más pesadas como la Flor de Lis cuando ya sea reina.