El último viaje a Grecia de la reina Sofía: dos fiestas con reencuentros donde faltaba Irene
Ha pasado los últimos días de agosto celebrando el cumpleaños de su confidente y otro evento único

La reina Sofía en la recepción en el Palacio de Marivent, en Palma de Mallorca. | | Europa Press
Se acaba el verano para todos los miembros de la Familia Real, incluida la reina emérita Sofía. Cada cual ha vuelto a sus responsabilidades institucionales o académicas, como es el caso de la princesa Leonor en San Javier y la infanta Sofía en Lisboa. En el caso de la abuela de estas dos herederas ha ocurrido algo parecido. Sus escapadas estivales y reencuentros sin hora de regreso se han terminado con la llegada de septiembre. El último viaje que ha realizado, a sus 86 años de edad, ha sido una escapada a Grecia, su país natal. Ha reservado el último fin de semana de agosto para regresar a su tierra y allí poder ver a sus familiares y amigos de otra época, cuando todavía no era reina de España y todavía su apellido gobernaba el país.
Ya está de vuelta en Madrid pero sus días en las islas helenas han sido una despedida del verano especial. Este año no ha podido pasar tantos días de vacaciones como otras veces. Su trabajo para la Casa Real ha ocupado parte de su rutina a pesar de tener menos carga, eventos y obligaciones con el paso del tiempo. Junio y julio han visto a una reina Sofía comprometida con la vida pública, pero desde agosto ha ha tenido la agenda oficial vacía. Su última aparición pública ocurrió en la recepción oficial en el Palacio de Marivent, en Palma de Mallorca, que se celebró el pasado 4 de agosto. Si tiene menos actos a los que acudir pero reduce sus escapadas estivales es porque en los pasillos de Zarzuela tiene otra preocupación que se come su tiempo. Todavía sigue pendiente del estado de salud de su hermana, Irene de Grecia, que vive junto a ella en la residencia oficial de los Reyes. Por cuidar de su hermana pequeña, la emérita se había reservado la carta del viaje a Grecia hasta los últimos días de agosto.
El motivo del viaje de la reina Sofía a Grecia
Apenas ha pasado un fin de semana, un puñado de días sin confirmar el número exacto, en su país natal. Después de todo el verano en Madrid junto a Irene de Grecia y una escapada a Mallorca para participar en la recepción anual. Este año ha cambiado sus planes y se ha perdido las semanas de descanso que siempre ha aprovechado en la isla balear. Allí ha solido instalarse junto a su hermana y pasaban unos días de diversión y tranquilidad junto a otros amigos, como su prima, Tatiana Radziwiłł, y el marido de esta, Juan Enrique Fruchaud. Esta vez, ni su hermana le ha acompañado ni ha alargado su estancia en Marivent.
Los días elegidos para volver a Grecia han sido de los más especiales. El mismo sábado 30 de agosto ocurría una celebración en la Familia Real griega que podría haber convencido a la reina Sofía de volver a casa. Este día fue el cumpleaños de su cuñada, la reina Ana María de Grecia, viuda del rey Constantino. La antigua monarca celebraba sus 79 años junto a sus familiares más cercanos y en las invitaciones procuró incluir a nuestra reina Sofía. La princesa Irene de Grecia ha rechazado este viaje por sus problemas de movilidad y salud, y ha celebrado en la intimidad de Zarzuela el aniversario de su cuñada.

La amistad entre la emérita y su cuñada
La relación de Sofía y su cuñada Ana María justifica esta escapada estival inesperada. Ambas mujeres son amigas desde hace décadas y con los años su dinámica ha trascendido lo institucional hasta construir una sólida amistad. Ana María de Grecia nació como princesa de Dinamarca pero adoptó la cultura helena cuando se casó con Constantino II en 1964. Antes ya estaba unida a nuestra reina emérita. En 1862 fue dama de honor en su boda con Juan Carlos I. En tiempos más recientes, Sofía ha sido un gran apoyo para Ana María desde el fallecimiento de Constantino II, en 2023, ofreciendo consuelo y compañía. Su afinidad se demuestra con el amplio archivo de imágenes que tienen juntas, en eventos oficiales, cenas y galas. Suelen ir del brazo, se les ha fotografiado conversando alejadas de la multitud, y en actos privados se sientan juntas y comparten risas.

Con todo esto, la reina Sofía era una de las invitadas más especiales del cumpleaños de la reina helena. Para acudir a esta señalada cita ha tenido que dejar en casa a otra de sus compañías más habituales. En los últimos meses, la reina Sofía no se ha separado de su hermana Irene más de una semana. Está pendiente de primera mano de su estado diario y conviven como lo hicieron de niñas en el palacio griego Atenas. En estos días no han podido estar juntas debido a la distancia, pero el recuerdo de sus días en el país mediterráneo habrá servido como consuelo para Sofía.
Una segunda fiesta en la Familia Real griega
Además de este especial cumpleaños, la Familia Real griega ha celebrado otro acontecimiento familiar único. Han bautizado al pequeño Theo, nieto de Pia Getty, la hermana mayor de Marie-Chantal, esposa del príncipe Pablo de Grecia. El sobrino nieto de los herederos simbólicos de la monarquía griega tiene apenas unos meses de vida y ha sido el centro de la conversación familiar en estos días finales de verano. La princesa Olympia ha sido la madrina de bautizo del pequeño, aunque se desconoce si la reina Sofía ha llegado a estar presente en la celebración.