San Javier refuerza la seguridad con una nueva valla ante la llegada de la princesa Leonor
La princesa afronta en San Javier la etapa final de su formación militar, marcada por nuevas medidas de seguridad
La princesa Leonor | Gtres
Después de haber pasado por la Academia Militar de Zaragoza y por la Escuela Naval de Marín, en Galicia, la princesa Leonor ha iniciado esta semana una nueva etapa en su preparación castrense. Se ha incorporado a la Academia del Ejército del Aire y del Espacio en San Javier, Murcia, donde completará el último tramo de su formación.
La heredera, que ostenta el rango de alférez de cuarto curso, permanecerá allí desde septiembre hasta finales de julio del próximo año, recibiendo formación especializada en aeronáutica en el centro que prepara a todos los futuros pilotos militares del país. Su presencia, por supuesto, no ha pasado inadvertida, y los responsables de la academia han tomado una decisión destacada para reforzar su seguridad.
La medida adoptada en San Javier por Leonor
Según publica Monarquía Confidencial, el centro ha decidido levantar un cerramiento en la parte del recinto más cercana al Mar Menor, coincidiendo con la llegada de la princesa. Dicho medio detalla que el proyecto incluye «la instalación de una valla metálica de dos metros y medio de altura, reforzada con alambre de espino en su parte superior», con el fin de incrementar la seguridad en una zona que hasta ahora permanecía abierta.
La inversión destinada a esta obra asciende a 181.860 euros y se ejecutará en un plazo estimado de cinco meses. La valla se ubicará en «la zona que linda directamente con la playa», por donde hasta ahora era posible acceder. Todavía no se ha adjudicado a ninguna empresa, pero se espera que pronto se haga.
La llegada de la hija mayor de los reyes ha convertido al centro murciano en foco de gran atención mediática. Sobre cómo será la valla, las mismas fuentes aseguran que tendrá «altura de 2,5 metros y estará construida con malla metálica simple reforzada», además de incorporar en la parte superior «un alambre de espino para impedir accesos no autorizados». También se prevén accesos controlados para vehículos, garantizando así «la operatividad de la zona sin renunciar a un control estricto».
Un nuevo desafío para la princesa en Murcia
Durante esta etapa, Leonor se enfrentará a un reto singular: aprender a pilotar un Pilatus PC-21. De momento se está entrenando en un simulador, pero pronto lo llevará a volar a más de 10.000 metros. No obstante, nunca estará sola, ya que el avión dispone de dos asientos y contará siempre con un instructor a su lado supervisando cada maniobra.
Asimismo, la princesa dispondrá de un tutor propio en el curso, además de un equipo de 15 agentes de seguridad y personal de apoyo. A esta protección se suma que la heredera tendrá una instructora exclusiva, una teniente que fue la primera mujer piloto de Eurofighter.