La casa 'burguesa' de Antonio Resines al lado del Retiro: tiene un aire moderno y toque clásico
El actor y cómico reside junto a su mujer, Ana Pérez-Lorente, muy cerca de la calle Goya, en una de las zonas sofisticadas

Antonio Resines, en una imagen de archivo. | Gtres
Antonio Resines es uno de los actores más queridos del cine y la televisión. El cómico, además, se ha labrado una gran carrera gracias a series como Los Serrano o colaborando en distintos formatos de la pequeña pantalla. Esto ha hecho que pueda gozar de un gran momento económico que se traduce en las propiedades que posee alrededor de nuestro país. Probablemente, la más especial es la que se ha convertido en su refugio, en el centro de Madrid, y donde reside junto a su mujer. Allí, también, todos juntos, superaron las complicaciones que tuvo que hacer frente Resines cuando se contagió de Covid, lo que hizo que tuviera que pasar por el hospital y quedarse en estado muy grave.
A lo largo de su vida ha mantenido una estrecha vinculación con la capital, y en especial con una de sus zonas más emblemáticas: el distrito de Retiro. Allí, entre calles arboladas y edificios señoriales, se encuentra su hogar, un piso amplio y luminoso que refleja tanto su personalidad como su historia familiar. Su vivienda no es solo un refugio, sino también un lugar cargado de recuerdos, una continuación natural del barrio donde creció y donde ha decidido permanecer.
Antonio Resines ha vivido siempre muy cerca del Retiro

El distrito de Retiro es uno de los más valorados de Madrid, tanto por su ubicación como por su calidad de vida. Situado en el centro-este de la capital, combina la tranquilidad de una zona residencial con la vitalidad cultural y social de un área urbana. Las calles están repletas de cafés clásicos, librerías, restaurantes tradicionales y pequeños comercios que todavía conservan la esencia del viejo Madrid. Este equilibrio entre modernidad y tradición es una de las razones por las que Resines ha decidido mantenerse en esta zona, a pesar del auge de otros barrios más nuevos o cosmopolitas. Aquí encuentra lo que él ha descrito como «la vida de barrio», donde aún se puede saludar al panadero o conversar con los vecinos de toda la vida.
Su vivienda se encuentra cerca de la calle Ibiza, una de las arterias principales del barrio y un enclave privilegiado por su cercanía al Parque del Buen Retiro. Esta calle, paralela a la avenida de Menéndez Pelayo, es una de las más codiciadas de Madrid. Vivir en ella significa tener a pocos metros uno de los parques urbanos más bellos de Europa, con sus estanques, avenidas de plátanos centenarios y aire puro que contrasta con el bullicio del centro. El barrio de Ibiza también es conocido por su ambiente familiar, sus terrazas animadas y sus mercados de productos frescos, como el Mercado de Ibiza, donde es común ver a los vecinos realizando la compra diaria. Antonio Resines, madrileño de pura cepa, se siente cómodo en este entorno que combina elegancia con autenticidad.
Su piso es amplio, luminoso y con un estilo clásico
El vínculo de Resines con esta zona es profundo y viene de lejos. En entrevistas ha comentado que su familia se mudó al distrito de Retiro cuando él tenía solo tres meses de vida, instalándose cerca de la calle Sainz de Baranda. Es decir, ha vivido prácticamente toda su existencia en el mismo entorno. Su infancia transcurrió entre los colegios del barrio y las tardes de juegos en el Retiro, un parque que conoce palmo a palmo. Esa continuidad vital ha hecho que nunca sintiera la necesidad de mudarse a otras zonas más exclusivas o apartadas. «Aquí está todo lo que necesito», ha afirmado en más de una ocasión. Para Resines, el Retiro no es simplemente una localización: es su paisaje emocional. El barrio es uno de los más bonitos y caros de Madrid y combina edificios antiguos con portales amplios y escaleras de mármol.

En Mi casa es la tuya, Resines mostró cómo era su casa; un piso amplio, luminoso y de estilo clásico, con techos altos, grandes ventanales y una decoración que combina muebles antiguos con elementos modernos. Los suelos de madera, los cuadros y las estanterías llenas de libros reflejan una personalidad culta, relajada y con gusto por lo tradicional. No es una vivienda ostentosa, pero sí cómoda, elegante y acogedora, muy acorde con su carácter. Además, cuenta con una distribución típica de los edificios antiguos del Retiro: amplios salones, pasillos largos y habitaciones espaciosas. La cocina, según lo mostrado en televisión, es práctica y luminosa, con una barra americana que permite compartir comidas de forma informal. El salón principal es el corazón de la casa: allí suele recibir a sus amigos y pasar las tardes viendo cine clásico o leyendo. Las paredes están decoradas con fotografías, carteles de películas y recuerdos de su carrera profesional, lo que convierte la vivienda en un pequeño museo personal. No hay artificio ni lujo excesivo: predomina un ambiente cálido, hogareño y vivido.
Como ya hemos comentado, para Resines, su casa no es solo un espacio físico, sino un refugio emocional. Tras su grave enfermedad en 2021, cuando estuvo ingresado varios meses por COVID-19, confesó que volver a su hogar fue una de las mayores alegrías de su vida. Allí se recuperó rodeado de los suyos, en un entorno que le resultaba familiar y seguro. En entrevistas posteriores habló del valor que tiene «volver a la normalidad de siempre», desayunar en su cocina o mirar por la ventana hacia el Retiro. Su vivienda representa estabilidad y arraigo, dos valores que siempre ha reivindicado frente a la superficialidad del éxito mediático. Además, el barrio de Ibiza conserva un carácter muy madrileño, con cafeterías de toda la vida, bares con terraza y pequeños comercios.

El Parque del Retiro, a escasos metros de su casa, es casi un protagonista más en la historia de Resines. Desde niño ha paseado por sus avenidas y ha vivido allí momentos importantes de su vida. Para él, el parque simboliza libertad, memoria y conexión con la ciudad. Es habitual que acuda a caminar o simplemente a sentarse en un banco para observar el ambiente. El Retiro es también un punto de inspiración para su trabajo como actor y productor, un espacio que representa la calma dentro del ritmo frenético de Madrid. Tenerlo tan cerca es, en cierto modo, una extensión de su propio hogar.