El aparatoso accidente de Pablo Urdangarin en Barcelona: fue atendido tras romperse el labio
El deportista sufrió un golpe en la cara en su último partido en la ciudad condal donde también se encontraba su madre

Pablo Urdangarin, en una imagen de archivo. | Gtres
Pablo Urdangarin está muy contento con su vida en Barcelona. El hijo de la infanta Cristina y de Iñaki Urdangarin ha encontrado mucha estabilidad siguiendo los pasos de su progenitor como jugador de balonmano. Y es que, en cada una de estas etapas, ha contado con el apoyo incondicional de su madre y, también, de su novia, quienes intentan no perderse ninguno de sus partidos. Ha sido este mismo fin de semana, cuando ambas se encontraban en las gradas, cuando el joven ha vivido un aparatoso accidente, en el que ha sufrido un golpe y por el que han tenido que atenderle el equipo médico.
En un momento dado, Pablo recibió un balonazo en la zona de la cara, por lo que los especialistas se vieron obligados a intervenir para poder parar la situación y, sobre todo, calmarle el dolor. Así, el resultado fue un labio roto y, sobre todo, un intenso dolor en esta zona del rostro que hizo que el joven tuviera que poner en ‘pause’ su papel en el encuentro. Al mismo tiempo que fue atendido por los médicos, tanto la infanta como Johanna, su novia, tenían cierta preocupación que hizo que la charla tan distendida que estaban teniendo se frenara totalmente en seco.
El difícil accidente que ha sufrido Pablo Urdangarin en un partido

Por suerte, el accidente fue menor y Pablo pudo retomar su función dentro del partido. Ya totalmente recuperado, el hijo de la infanta Cristina tendrá que llevar cierto reposo y, sobre todo, proteger la zona de futuros golpes. Algo que será especialmente difícil para el joven, quien está totalmente volcado con su carrera deportiva. Pablo nació a finales de los 2000 en Barcelona. Desde muy joven se vinculó al balonmano, deporte que practican varios miembros de su familia; su padre, Iñaki Urdangarin, fue una figura destacada del balonmano español, lo cual sin duda influyó en su camino. En su etapa formativa jugó en el colegio Liceo Francés de Barcelona.
También pasó por el club Handbol Esplugues —de Esplugues de Llobregat— en sus primeros años. A los 17-18 años se marchó al extranjero para seguir su desarrollo deportivo; por ejemplo, en 2018 jugó en el juvenil del club alemán TSV Hannover-Burgdorf. En 2019 fichó por el club francés HBC Nantes, lo que supuso un salto significativo en su carrera. En ese momento, acababa de cumplir la mayoría de edad, lo que muestra que su club de formación —y los movimientos internacionales— ya lo estaban preparando para un nivel más elevado. En julio de 2021, Pablo fichó con la sección de balonmano del FC Barcelona B —el filial del FC Barcelona— para jugar en División de Honor Plata.
La carrera de Pablo Urdangarin en el balonmano
En octubre de 2021, consiguió su debut con el primer equipo del FC Barcelona en la Liga ASOBAL, entrando en el partido y marcando goles. Durante su etapa en el Barça, se le señaló que tenía que competir por minutos en una plantilla con extremos/laterales muy consolidados, lo que motivó su salida para buscar más oportunidades. En 2023, Pablo fichó por el BM Granollers, un club histórico de la Liga ASOBAL que le ofrecía mayor protagonismo y minutos de juego. Allí comenzó a jugar habitualmente en la categoría absoluta, en la liga española de primer nivel.

Durante esta etapa, Pablo ha cambiado de posición, adaptándose a cubrir el puesto de lateral derecho, lo que muestra su disposición al cambio y a crecer dentro de distintas responsabilidades del equipo. Este paso le permitió afianzarse como jugador profesional, ganar experiencia, y situarse en la órbita de la selección española. Uno de los hitos más relevantes de su carrera llegó cuando fue convocado por primera vez con la selección absoluta de España —la selección nacional de balonmano— para un doble amistoso ante Suecia, en octubre de 2025. Sin duda alguna, esta convocatorio simbolizó su paso de promesa a jugador que puede aportar al máximo nivel nacional.
El apoyo incondicional de la infanta Cristina y su novia, Johanna Zott
Antes de ese momento ya había participado en competiciones universitarias o de selección menor, como el Mundial Universitario, lo que también cuenta como experiencia internacional. Pablo ha señalado públicamente que su padre le ayuda mucho “en lo mental” más que en lo técnico, dada la experiencia de Iñaki como jugador top. Pablo es zurdo, lo que le brinda una ventaja en ciertas posiciones ofensivas del balonmano. Tiene una altura importante —en torno a 1,94 m— y un físico atlético, lo que le habilita para jugar en categorías altas.

Ha declarado que su objetivo es «no ponerse límites» y ver hasta dónde puede llegar. Además, asume la presión que conlleva llevar el apellido Urdangarin: «Que me comparen con mi padre significa que lo estoy haciendo bien», ha confesado. Uno de sus retos inmediatos es consolidarse como titular en su club, tener continuidad, y consolidar su posición en la selección. Al mismo tiempo, se enfrenta al reto de «ser tratado como uno más» en el vestuario, evitando que su apellido sea lo que predomine. En sus partidos es muy normal que acuda su padre y, también, lo hace la infanta Cristina, aunque siempre sin coincidir. También, otro de los apoyos clave en la grada suele ser su novia, Johanna Zott, con quien lleva saliendo un par de años, y su hermana, Irene Urdangarin, quien no se pierde ninguna de sus victorias.
