El millonario patrimonio de Kiko Hernández: del plató de 'Sálvame' al cielo de Melilla
El ex de ‘Sálvame’ ha sido muy inteligente en lo que a negocios y patrimonio se refiere

Kiko Hernández | Telecinco
Kiko Hernández ha sabido convertir su fama televisiva en una sólida plataforma económica y empresarial. El que fue uno de los rostros más reconocibles de Sálvame ha evolucionado desde su salto a la fama en Gran Hermano 3 (2002) hasta convertirse en un personaje mediático con visión de negocio. Hoy su nombre no solo se asocia a los platós, sino también a inversiones inmobiliarias, empresas y un ambicioso proyecto hostelero junto a su marido, el actor Fran Antón.
De colaborador televisivo a empresario
Aunque no existen cifras oficiales, se estima que Kiko Hernández llegó a cobrar unos 900 euros por cada aparición diaria en televisión, lo que le habría supuesto unos 250.000 euros anuales de ingresos estables durante su etapa en Sálvame.
A esa cantidad se sumarían beneficios derivados de su imagen pública, participaciones en eventos y contratos de publicidad. Sin embargo, la verdadera clave de su estabilidad económica ha sido su capacidad para diversificar sus fuentes de ingresos, especialmente tras el final del programa que lo consolidó como figura mediática.

Inversiones inmobiliarias y sociedades
Entre sus activos más destacados se encuentra una vivienda en Madrid, valorada en unos 638.000 euros, y posteriormente un chalet unifamiliar de 700 m² en una parcela de 3.000 m², cuya tasación supera los 2,5 millones de euros.
Además, figura como administrador en varias sociedades vinculadas a su imagen y a proyectos empresariales, reflejo de una estrategia orientada a profesionalizar su marca personal.
‘El cielo de Melilla’ y contratiempos

Kiko Hernández y su pareja no solo han hecho un magnífico tándem en el amor, también en los negocios. La oportunidad de buscar nuevas fuentes de ingresos más allá de la pequeña pantalla cobró especial fuerza cuando el extinto Sálvame echó el cierre.
En ese período llegó a su vida una localización muy especial: Melilla, la tierra natal de su hoy marido, Fran Antón. Allí, Kiko ha encontrado el escenario perfecto para dar forma a su nuevo proyecto: El cielo de Melilla by Fran y Kiko.
Ubicado en la calle General Marina 15, en pleno corazón de la ciudad, El cielo de Melilla es una terraza-bar situada en la quinta planta de un edificio emblemático, concebida como un espacio elegante con vistas privilegiadas. El local combina gastronomía, música y ocio, reflejando la identidad y el estilo de la pareja, detalla el El español. Este proyecto supone un paso firme hacia la consolidación de Hernández como empresario del entretenimiento y la hostelería, ampliando su presencia más allá de la televisión.
Ojo, que no todo ha sido éxito. A lo largo de los años, Kiko Hernández ha tenido que enfrentarse a algunos obstáculos financieros y judiciales: En 2017, se registró una anotación de embargo por parte de Hacienda sobre una de sus propiedades en Madrid. En 2025, fue condenado a pagar 30.000 euros de indemnización a Julia Janeiro por vulneración del derecho al honor e intimidad.
Pese a estos contratiempos, su capacidad de reinvención y su red de activos le han permitido mantener una posición económica sólida.
De hecho, considerando sus bienes inmuebles, sociedades activas y nuevas líneas de negocio, se calcula que Kiko Hernández poseería un patrimonio neto superior al millón de euros, aunque esta cifra debe tomarse con cautela, ya que no existen registros públicos oficiales que confirmen sus cuentas.
