La cuenta pendiente del Emérito con Zarzuela: por qué no duerme en la que fue su casa
Juan Carlos se reunirá, este sábado, con su familia en El Pardo, pero, al igual que en otras veces, no pernoctará en Madrid
El rey Juan Carlos, en una imagen de archivo. | Gtres
Este fin de semana, todos los ojos están puestos en El Pardo. Será el sábado cuando, después de un año, el rey Juan Carlos acuda al Palacio para reunirse con su familia. Lo hará después de ser invitado, por el rey Felipe, al almuerzo privado para celebrar los 50 años de democracia en nuestro país. Hasta última hora, su participación en esta comida ha sido toda una incógnita, y un extremo que no han confirmado desde la Casa Real, ya que el Emérito no ha sido invitado a los eventos conmemorando el fin de la dictadura ni tampoco coincidiendo con la imposición del Toisón de Oro a la reina Sofía.
Un detalle que, sin duda, podría haber hecho mella en la decisión del rey Juan Carlos, quien, contra todo pronóstico, ha decidido dejar sus rencillas de lado y será un invitado más a este almuerzo. Allí se reunirá con su hijo, el rey Felipe VI, la reina Letizia, su mujer, la reina Sofía, y sus nietas, Leonor y Sofía. Lo hará, además, a pocos días de que se presenten sus memorias, en español, y después de que se hayan publicado en Francia, a principios del mes de noviembre. En lo que se ha conocido del libro, el rey Juan Carlos tiene algún que otro recado para su hijo y su nuera, así como palabras de amor hacia su mujer.
El Emérito se reunirá con su familia este sábado en El Pardo
Unas palabras que, sin duda, han podido hacer mucho daño, sobre todo el actual Rey y a Letizia, quienes son los que peor parados salen de las memorias del Emérito. Sea como fuere, el rey Juan Carlos estará este sábado en El Pardo, donde disfrutará de una bonita velada junto a sus hijos, sus nietos y su mujer. Aunque eso sí, no se quedará a dormir, como confirman en El Mundo, al igual que hizo hace dos años, cuando vivió, también, una reunión familiar para celebrar el 18 cumpleaños de la princesa Leonor. En ese momento, el Emérito se marchó a dormir a otro lugar, mientras que, este sábado, volverá a casa. Pero ¿por qué no pernocta en Zarzuela?
Las cinco razones por las que no duerme en Zarzuela
Lo cierto es que hay varias razones que cimientan esta decisión. La primera tiene que ver con la privacidad y la autonomía personal. Uno de los motivos principales es que Juan Carlos, como rey emérito, busca mantener una vida privada lo más autónoma posible. Tras su abdicación, dejó de ser el jefe del Estado y su figura pasó a ser de carácter más personal y discreto. Por eso, incluso cuando visita Madrid, prefiere alojarse en residencias privadas o fincas cercanas a Zarzuela, lo que le permite tener un mayor control sobre quién lo ve y cómo se organiza su día a día, sin estar expuesto al seguimiento mediático constante. Esta decisión responde a un deseo de separar su vida pública de la vida privada, evitando que su presencia en la residencia oficial sea objeto de atención mediática continua.
Además, las veces en las que visita Madrid, también aprovecha para marcharse hasta Galicia. Es por eso que si acude a algún evento en la capital, horas más tarde coge su avión privado para marcharse al norte de nuestro país. También, hay que tener en cuenta que hay ciertas restricciones institucionales. El Palacio de Zarzuela es la residencia oficial de la Jefatura del Estado y actualmente está ocupado por el rey Felipe VI y la reina Letizia.
Legal y formalmente, no existe un derecho automático del rey emérito para pernoctar allí cuando quiera, y la Casa Real ha definido que Zarzuela es principalmente un espacio de la monarquía en activo —a pesar de que allí viva la reina Sofía y su hermana, la princesa Irene—. Además, fuentes del Gobierno han señalado que la residencia oficial no está concebida como alojamiento permanente para personas que ya no ocupan la Jefatura del Estado, lo que refuerza la idea de que Juan Carlos debe buscar alternativas fuera del palacio.
También, el rey Juan Carlos cuenta con opciones de alojamiento alternativas. Durante sus estancias en Madrid, Juan Carlos ha optado por alojarse en fincas privadas cercanas, a apenas unos kilómetros de Zarzuela, o incluso en casas de amigos. Estas ubicaciones permiten que mantenga cierta cercanía con la residencia oficial para encuentros puntuales, pero sin la formalidad y exposición que implicaría dormir dentro del palacio. Este enfoque le permite conservar independencia, seguridad y privacidad, evitando la logística compleja que supondría pernoctar en Zarzuela bajo la mirada de la prensa y del personal del palacio.
Sin duda alguna, la posición de su familia también influye mucho en la decisión de dormir fuera de Zarzuela. Felipe VI ha permitido el acceso de su padre a Zarzuela en circunstancias concretas, generalmente cuando ni la reina Letizia ni la reina Sofía están presentes. De hecho, algunos de los aposentos que pertenecieron al rey emérito permanecen cerrados la mayor parte del tiempo y solo se abren en ocasiones excepcionales, lo que refleja una intención de preservar la privacidad y mantener cierta distancia en la convivencia familiar dentro del palacio.
En conjunto, la situación refleja un equilibrio complejo, ya que Juan Carlos quiere conservar un vínculo con la residencia real, pero también busca una vida más libre y privada; la monarquía, por su parte, quiere respetar su figura sin comprometer la organización de la residencia oficial ni la seguridad de la familia actual. Por ello, su alojamiento en Madrid se organiza fuera de Zarzuela, conciliando discreción, respeto institucional y decisiones familiares. Aún así, en más de una ocasión, el Emérito ha dejado claras sus ganas de volver a España, recuperar su vida normal y, sobre todo, tratar este tema con cierta normalidad. Es más, también ha expresado su deseo de pernoctar en la que fue «su casa». También ha señalado que no se trata solo de nostalgia, sino de algo simbólico: recuperar parte de su vida personal en su antigua residencia.
No obstante, también ha indicado que su residencia principal seguirá siendo Abu Dabi, y que, tanto en sus visitas como en un posible retorno futuro, desea organizar su vida personal «en ámbitos privados», para mantener su intimidad. Desde Zarzuela, por su parte, han explicado que no tienen «nada que responder» públicamente sobre esas ganas, ya que esas cuestiones se manejan en privado.