«¡Por Charly!»: así es el discreto marido de Lydia Lozano que está hospitalizado por una bacteria
El arquitecto tuvo que ser ingresado en el hospital después de infectarse por una bacteria en una operación de espalda

Lydia Lozano junto a su marido, Charly. | Gtres
Lydia Lozano está pasando unos días especialmente difíciles. Las alarmas saltaron el pasado viernes cuando la colaboradora de televisión se ausentó de su puesto de trabajo en De viernes. Desde el programa afirmaron que la televisiva estaba pasando por un momento especialmente delicado y le deseaban toda la suerte del mundo. En las últimas horas, además, hemos podido ver unas imágenes de la que fuera colaboradora en Sálvame, donde se la ve saliendo del hospital, con rostro de preocupación y la cara desencajada. Y es que su marido, Charly, está pasando por un bache de salud que ha hecho que tenga que pasar unos días en un centro médico especializado. Pero ¿quién es realmente Charly?
Lo cierto es que, a pesar de los años que Lydia pasó en Sálvame, un programa de tira diaria donde pudimos conocer un poco más a su colaboradores, siempre intentó mantener su relación de pareja en un segundo plano. Y es que, al contrario que, por ejemplo, Miguel, el marido de Belén Esteban, quien sí que ha hecho pequeñas incursiones en la televisión, Charly siempre ha preferido estar en un plano más discreto. Esto no ha evitado que Lydia hable sobre él y, sobre todo, le dedicara su icónico salto en Splash, famosos al agua, con un grito que pasó a la historia: «¡Por Charly!».
Charly, el marido de Lydia Lozano que es arquitecto
Charly García‑San Miguel tiene una vida laboral muy alejada del mundo de la televisión. Siempre ha mantenido un perfil discreto, lejos del foco mediático, prefiriendo una vida más tranquila y privada. Charly y Lydia se conocieron a mediados de los años 80 de manera casual y se casaron en junio de 1990. Desde entonces, han construido una relación basada en la confianza, la honestidad y la complicidad. Lydia ha declarado en numerosas ocasiones que Charly es su mejor amigo, su compañero y su soporte emocional, alguien que la equilibra y le da fuerza para afrontar la presión mediática que rodea su vida profesional. A pesar de la notoriedad de Lydia, Charly ha sabido mantener un papel de apoyo constante, ocupándose también de los asuntos domésticos y de la vida cotidiana, lo que permite a Lydia centrarse en su trabajo y en su carrera.
En varias ocasiones, la colaboradora ha comentado que ambos decidieron no tener hijos, aunque siempre fue algo que su marido deseó. Aún así, decidieron trabajar su relación de pareja que se ha fortalecido mucho en los últimos años. Sobre todo porque Charly se ha tenido que enfrentar a algún que otro problema de salud, incluyendo una hernia lumbar que requirió cirugía y complicaciones recientes derivadas de una infección grave. Durante estos momentos difíciles, Lydia ha hablado públicamente del profundo vínculo y del apoyo mutuo que caracteriza su relación.
El complicado estado de salud que vive tras infectarse de una bacteria
Lydia describe a Charly como alguien honesto, estable y discreto, que sabe decirle lo que piensa y mantenerla con los pies en la tierra. Para ella, representa el pilar sobre el que se sostiene su vida, un compañero silencioso pero constante, que le aporta equilibrio y tranquilidad en medio de la exposición mediática constante. Como decíamos, su relación se caracteriza por ser profunda, estable y basada en la confianza mutua. A diferencia de la vida mediática de Lydia, Charly mantiene un perfil discreto y prefiere permanecer fuera del foco público, lo que aporta a la pareja un equilibrio importante.
Se conocen desde mediados de los años 80 y se casaron en 1990. Desde entonces, han construido un vínculo sólido que Lydia describe como una combinación de amistad, amor y apoyo constante. Lydia ha destacado en varias entrevistas que Charly es su «mejor amigo, su compañero y su pilar», alguien que la mantiene centrada y le permite afrontar la presión que conlleva su carrera televisiva. Él no solo actúa como esposo, sino que también participa en la gestión del hogar y en la vida cotidiana, lo que ayuda a Lydia a equilibrar su trabajo y su vida personal. Sobre su último ingreso, son muy pocos datos los que se conocen.
Es más, las únicas imágenes que hemos podido ver han sido las de Lydia saliendo con rostro de preocupación de un hospital de Madrid. En un momento dado, además, la colaboradora de televisión se paró a hablar con los medios de comunicación, entre lágrimas, confirmando que su marido había contraído una infección bacteriana tras una de sus operaciones de espalda. Al parecer, como contaron en el programa Fiesta, esta infección alcanzó algunos órganos vitales y tuvo que ser ingresad de urgencia, ya que el microorganismo comenzaba a afectar al corazón que podría provocar daños «más serios».
Así, Charly tuvo que pasar por quirófano porque la bacteria «se comió una válvula de su corazón». En todos estos días, la colaboradora de televisión no se ha separado del lado de su marido y ha estado pendiente, en todo momento, de su evolución. Así, Lydia ha confesado que «la lucha continúa» y que están siendo momentos complicados, llenos de altibajos y situaciones, sobre todo, «de gran desesperación». Por el momento, y por recomendación médica, Charly tendrá que seguir en el hospital para saber cómo evoluciona. Esto hace que Lydia se haya tenido que ausentar de su puesto como colaboradora en De viernes hasta que su marido esté totalmente recuperado.
