El refugio de Joaquín Prat en Mallorca con un porche mediterráneo, madera y tonos cálidos
El presentador se compró, hace casi tres años, un adosado al lado de Palma de Mallorca por más de medio millón
Joaquín Prat, en una imagen de archivo. | Gtres
Joaquín Prat siempre se ha sentido muy unido a Mallorca. El presentador de Telecinco viaja con asiduidad a la isla, donde se encuentra de lo más a gusto y, sobre todo, donde, hace un tiempo, decidió comprarse un bonito chalé que comparte con su pareja y su hijo durante la temporada estival. La casa fue adquirida por el mítico periodista hace casi tres años y estaba valorada en casi medio millón de euros. Allí se pasea en barcos, descubre las bondades de la comida mallorquina y, también, se relaja después de su continua actividad en la capital.
Y es que Prat mantiene una relación muy estrecha con Mallorca, donde posee una vivienda que él mismo ha descrito en diversas entrevistas como su auténtico «refugio mediterráneo». La casa no es un inmueble ostentoso al estilo de otras residencias de famosos en la isla; más bien es una vivienda de estilo mallorquín contemporáneo, pensada para descansar, desconectar del ritmo de la televisión y disfrutar del tiempo con su familia y amigos.
Así es el refugio mediterráneo de Joaquín Prat en Mallorca
Se trata de una casa luminosa, amplia y con un diseño sencillo pero cálido, donde predominan los materiales naturales —madera, piedra y fibras vegetales— y una decoración mediterránea serena. Los espacios abiertos y la luz juegan un papel fundamental: grandes ventanales, techos altos y zonas de exterior que amplían la sensación de frescura y tranquilidad. El corazón de la vivienda es el porche, un espacio donde Prat suele pasar largas horas leyendo, cocinando al aire libre o simplemente descansando. También destaca el jardín, cuidado pero sin estridencias, y una zona de piscina que se ha convertido en su lugar favorito durante los meses de verano.
Mallorca se ha convertido para él en un punto de equilibrio personal. Allí encuentra la calma que contrasta con el ritmo frenético de su trabajo diario en televisión. Es habitual que pase temporadas más largas en la isla durante las vacaciones, donde aprovecha para practicar deportes acuáticos, disfrutar del mar y reunirse con un pequeño grupo de amigos cercanos. Aunque Joaquín Prat es una figura conocida, ha sido muy cuidadoso al mantener su vida privada a salvo. Nunca muestra la ubicación exacta ni detalles específicos de la casa, pero sí transmite la importancia emocional que tiene para él: un espacio íntimo, familiar y muy ligado a su bienestar.
Una casa construida a su gusto y en tonos cálidos
Lo cierto es que Prat decidió reformar la casa a su gusto y, sobre todo, construirla con los materiales, las formas y las decoración que más le gustaban. El chalé adosado se levantó en una parcela de unos 200 metros cuadrados en la localidad de Sant Agustí de Palma, uno de los barrios a las afueras de la ciudad. Como informó la revista Lecturas, en su momento, cuenta con una buenísima conexión a otras partes de la isla de Mallorca y tiene, además, todos los servicios muy a mano, sobre todo lo que tiene que ver con el mar Mediterráneo como la paz y la tranquilidad que se pueden vivir en emplazamientos idílicos como estos. El interior está distribuido en dos pisos con sótano y, también, tiene dos terrazas y, sobre todo, un gran jardín de más de 70 metros cuadrados.
En su momento, Prat compró la casa sobre plano y tuvo que pedir una hipoteca de 450.000 euros que terminará de pagar en 2042. Joaquín Prat mantiene desde hace años un vínculo especial con Mallorca, isla que considera su refugio personal y familiar. Aunque su carrera profesional se centra en Madrid y en la televisión nacional, Mallorca representa para él un espacio de tranquilidad, desconexión y contacto con la naturaleza, lejos del ritmo intenso de su vida mediática.
Las otras propiedades de Joaquín Prat
Su relación con la isla se manifiesta principalmente a través de su residencia en Palma de Mallorca, donde posee un chalet en una zona residencial de Sant Agustí. La casa no es un símbolo de ostentación, sino un hogar pensado para disfrutar del clima mediterráneo, con jardín, terrazas, piscina y espacios abiertos que favorecen la vida al aire libre. Allí pasa largas temporadas, sobre todo durante los meses de verano, y comparte tiempo con su familia y amigos más cercanos.
Mallorca también ha sido escenario de momentos familiares importantes: celebraciones privadas, vacaciones con su hijo y actividades de ocio relacionadas con el mar y la naturaleza. El presentador ha declarado en entrevistas que la isla le permite recargar energías, leer, descansar y mantener el equilibrio emocional que necesita para compatibilizar su trabajo en televisión con su vida personal. A nivel simbólico, Mallorca representa para Joaquín Prat un refugio mediterráneo, un lugar donde puede ser él mismo sin la presión del foco mediático. La combinación de paisajes tranquilos, buena gastronomía y un entorno seguro para su familia convierte la isla en un eje importante de su vida fuera del trabajo.
Aunque eso sí, Mallorca no es el único lugar que le acoge. El presentador se compró, hace tiempo, un ático en Madrid, concretamente en la zona norte. La vivienda cuenta con 75 metros cuadrados y posee una decoración de estilo moderno y minimalista. Además, tiene garaje y trastero y está valorado en unos 800.000 euros. Es su residencia habitual junto a su hijo. Además de las viviendas, posee al menos un garaje en Las Rozas. Este tipo de propiedad suele considerarse un complemento inmobiliario habitual. Así, su patrimonio ascendería al millón de euros. Una cifra que tendremos en cuenta considerando sus dos inmuebles principales, así como otras inversiones y sus ingresos como presentador.