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El error de Isabel Preysler en sus memorias que afecta directamente un novio de Tamara Falcó

La celebridad que nació en Manila cometió una errata en la primera edición de su libro que su hija detectó y arregló

El error de Isabel Preysler en sus memorias que afecta directamente un novio de Tamara Falcó

Isabel Preysler junto a Tamara Falcó durante la presentación de sus memorias 'Mi verdadera historia', a 22 de octubre de 2025, en Madrid. | | Europa Press

Isabel Preysler tiene una larga trayectoria como personaje público en España. Sus matrimonios han despertado el interés de generaciones enteras y sus amistades le han llevado a recorrer cada esquina de la industria del entretenimiento. Su paso más reciente en el camino de la fama ha sido entrar como colaboradora en El hormiguero. A sus 74 años ha firmado como tertuliana ocasional de este programa de Antena 3 en el que comparte plató con una de sus hijas, la conocida Tamara Falcó. Su última intervención en la emisión del jueves 11 de diciembre le ha recolocado en la crónica social.

La nueva colaboradora apareció en los últimos minutos de programa, en el espacio de debate que Pablo Motos reversa para que los invitados compartan sus opiniones sobre la actualidad del día. Isabel estuvo acompañada por su hija y por Nuria Roca, Juan del Val y Cristina Pardo. Aprovechó su oportunidad para promocionar sus memorias, Isabel Preysler. Mi verdadera historia, y, como gesto especial, regalar un ejemplar a cada persona del público. El presentador utilizó esta cuña publicitaria para sacarle nuevas informaciones a la celebridad en relación con el libro.

Isabel Preysler sobre el primer novio de Tamara

Uno de los momentos más divertidos de la noche llegó cuando Pablo Motos preguntó a Tamara si había descubierto algún detalle desconocido de la vida de su madre gracias al libro. Entre risas, la marquesa de Griñón confesó que Isabel Preysler confundió el nombre de su antiguo novio estadounidense con el de su perro: «No se acordaba de cómo se llamaba mi novio americano y lo llamó por el nombre de su perro». Preysler, avergonzada pero elegante, se defendió explicando que los nombres eran muy parecidos, «de Kevin a Collin». Esta corrección de la chef y colaboradora televisiva se aplicó en la segunda edición impresa y ha quedado como una anécdota graciosa más entre madre e hija.

No se tienen muchos datos confirmados sobre este novio estadounidense que ocupó el corazón de Tamara Falcó. Puede que se conocieran durante los años de estudiante de la madrileña. Tamara vivió durante un tiempo en Massachusetts, donde estudió la educación secundaria y un grado superior en comunicación. Se formó en el Forest Lake College, en el estado de Illinois, para luego ampliar su formación en Milán y la Universidad de Navarra. Lo suyo fue un amor adolescente del que casi no se llegó a hablar en la prensa del corazón. Todavía, a día de hoy, se cuenta que el primer novio de Tamara fue Alberto Comenge. Salieron entre 2004 y 2005, cuando la marquesa tenía 23 años.

Los perros que acompañan a Isabel Preysler

Isabel confundió el nombre del novio de Tamara, que era Kevin, con el de su perro Collin. Esta mascota es conocida por los seguidores más fieles de la celebridad, aunque no es la única. Isabel es conocida por tener varios perros a su cargo, que le acompañan en el día a día en su casa de Madrid. Uno del que se habló mucho hace años fue Celine, la perra que Isabel regaló a Mario Vargas Llosa en 2016. El gran danés llegó a la casa familiar siendo apenas un cachorro, creció hasta superar los 50 kilos y murió en 2021. Su afición por los animales le llevó a disfrazarse de gato en el programa Mask singer en 2021, aunque no se conozca que haya tenido gatos en su casa.

Tamara, por su parte, también tiene varios amigos perrunos. Se dice que el caniche Jacinta es su favorito, pero también cuida de Vanilla, un golden retriever, y de Missy y Dalkkung, dos cachorros que adoptaron hace apenas unos meses. La última incorporación ocurrió este mes de diciembre: «La llegada de Nala fue completamente inesperada. En realidad, solo iba a pasar unos días con nosotros, porque necesitaba una casa de acogida… pero fue imposible dejarla marchar». Estos acompañantes son un motivo de alegría en el hogar de Tamara e Íñigo Onieva, mientras esperan la llegada de su primer hijo. El matrimonio ha hablado públicamente de su deseo de convertirse en padres pronto y de los métodos que están aplicando para facilitar la búsqueda.

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