Dos personas hospitalizadas en Inglaterra por la exposición a una “sustancia desconocida”
Dos personas han sido hospitalizadas en estado crítico en el hospital de Salisbury tras haber estado expuestas a una “sustancia desconocida” en Amesbury, a pocos kilómetros del lugar donde el exespía ruso Sergei Skripal y su hija Yulia fueron víctimas de un envenenamiento en marzo.
Dos personas han sido hospitalizadas en estado crítico en el hospital de Salisbury tras haber estado expuestas a una “sustancia desconocida” en Amesbury, a pocos kilómetros del lugar donde el exespía ruso Sergei Skripal y su hija Yulia fueron víctimas de un envenenamiento en marzo.
“En este momento no está claro si se ha cometido un crimen”, ha explicado la policía del condado de Wiltshire en un comunicado. “Una investigación policial ha comenzado y se ha coordinado una respuesta de varias agencias”, añade el comunicado.
Los dos pacientes, que se encuentran en «estado crítico», “están siendo tratados por una presunta exposición a una sustancia desconocida en el hospital de Salisbury”, ha explicado la policía, que considera los hechos como un “incidente importante”.
En un primer momento, parecía que los dos pacientes se encontraban en estado crítico debido al consumo de alguna droga como la heroína o la cocaína, pero las pruebas continúan para determinar cuál es la sustancia que ha provocado esta situación a los pacientes y la policía asegura que mantiene “una mente abierta respecto a las circunstancias que rodean este incidente”.
La policía de Wiltshire ha señalado que habrá una mayor presencia policial en los alrededores de Amesbury y Salisbury y que varias áreas frecuentadas por las dos personas hospitalizadas serán acordonadas como medida de precaución.
We’ve declared a major incident after it is suspected that two people might have been exposed to an unknown substance in Amesbury. Full details here: https://t.co/yaaUqH97Te pic.twitter.com/xryG8Cy7nV
— Wiltshire Police (@wiltshirepolice) 4 de julio de 2018
El 4 de marzo, Sergei y Yulia Skripal fueron hallados inconscientes y fueron hospitalizados en estado crítico en Salisbury tras un intento de envenenamiento con un agente nervioso.
Londres acusó a Moscú de estar detrás de este ataque, pero el Kremlin negó su implicación. La situación generó una crisis diplomática entre ambos países y una oleada de expulsiones de diplomáticos por parte de Reino Unido y sus países aliados, así como de Rusia y sus aliados.